El Deportivo Maipú sabía que no podía dejar pasar la oportunidad de ganar y buscar un pasaje a la ronda de ganadores de la proxima fase. Así, despachó al escolta, Estudiantes de Río Cuarto por 2 a 1 y jugará las dos últimas fechas pensando en la clasificación.
Por eso, el Gringo Sperdutti dispuso un dibujo muy ofensivo: tres defensores, cuatro volantes y tres delanteros. Pero eso exigió mucho sacrificio y desgaste.
Como el que había que hacer para presionar en todos lados a un rival que llegó maquillado: con 9 cambios dispuestos por Vázquez para preservar fuerzas de cara al ‘clasico’ como se lo considera el próximo duelo de los riocuartenses ante los puntanos.
Asfixiando al cordobés, el Cruzado le creó tres o cuatro situaciones claras para desnivelar en los primeros 20 minutos. Una media vuelta de Amaya, otra aparición sorpresiva de Ojeda, para tirarla por arriba, y Persia, de lo mejor de Maipú para darle primero al travesaño y después con una volea que se fue por arriba.
En el medio, el peso del trámite pasaba por el desdoblamiento permanente de Vuanello como abanderado del sacrificio: arrancaba como delantero y daba una mano como volante, tapando las subidas de Cainelli por izquierda.
Así, el Cruzado se fue al descanso en ventaja, y se disponía a terminar la faena en el complemento.
Por precaución, a poco de reiniciado el juego, Sperdutti mandó a la cancha a Rudisi para volver a armar un 4-4-2.
Ante esto, Marcelo Vázquez respondió con variantes ofensivas, pero el Cruzado ya estaba muy bien parado en el fondo. Y aunque sufrió el descuento, al final fue feliz.
Dos que vuelven
Emiliano Fernández y Santiago González cumplieron sus supensiones y luego de una fecha de ausencia, podrán estar el miércoles en Catamarca cuando el Cruzado enfrente a Unión Aconquija, En la última fecha, cerrará de local ante Desamparados en el Higinio Sperdutti.
Una verdadera fiesta
Antes del cuarto de hora del complemento los hinchas del Deportivo Maipú imuminaron el cielo maipucino con fuegos artificiales.
La Banda Botellera cantó durante todo el partido y explotó cuando Sperdutti mandó a la cancha a Sebastián Coria, el ídolo que volvió a ponerse esta casaca.
Un buen gesto
A los 8 minutos del primer tiempo, se paró el partido y la terna arbitral se reunió en la mitad de la cancha para brindar un homenaje a los árbitros salvajemente agredidos en Chivilcoy la semana pasada. Nelson Leiva (San Juan) y Walter Ruarte (La Rioja). Un gesto que se vio en varias canchas.