El presidente Nicolás Maduro recurrió al 40% de las reservas de oro de Venezuela sólo durante el año pasado en un intento desesperado por financiar programas de gobierno y pagar millones a titulares de bonos, evitando así un anunciado default.
El gobierno vendió un total de 73 toneladas de oro a dos empresas en Emiratos Árabes Unidos y otra en Turquía, informó a la prensa en Caracas el parlamentario opositor Carlos Paparoni.
Esta operación disminuyó las reservas de 184 toneladas a cerca de 110 toneladas a fines del año pasado, según una persona conocedora de la situación, que corroboró los datos de Paparoni.
Maduro sacó los 2,34 millones de onzas de oro (equivalentes a unos u$s 3.100 millones al precio spot actual) de las bóvedas del Banco Central toda vez que la deuda subía más y más y las opciones de financiamiento desaparecieron luego de que Estados Unidos aplicara sanciones contra su régimen e incluso contra los inversores que apostaran a títulos del país.
En medio de la ofensiva internacional para persuadir al gobernante autoritario de que ceda el poder a un gobierno de transición, la oposición también trata de frustrar más ventas de oro para evitar un saqueo del país durante los últimos días en el poder de Maduro.