La belleza puede ser un problema, en especial cuando las madres establecen una suerte de competencia con las hijas. Algo que sucede y mucho en las familias de las famosas donde las divas mayores mantienen su belleza a como dé lugar y donde las hijas adolescentes y jóvenes se presentan como una suerte de espejo donde no es fácil mirarse.
Es que los años traen aparejados celulitis, flacidez, arrugas y más. Rasgos del crecimiento que muchos internalizan con resignación, que otros aceptan sin problemas y que le pesan a un tercer grupo. Allí aparece la lozanía de la piel de una joven y el cuerpo escultural que pesa como una piedra ante la mirada de quien ya perdió esos rasgos.
Un caso muy reciente fue el de Wanda Nara y su madre, Nora Colosimo. Ambas compartieron unas vacaciones y posaron para una foto donde la abuela de los hijos de Wanda apareció con un short muy ajustado y con una remera blanca diminuta. Las redes sociales no demoraron en "matar" a esta señora a quien acusaron de intentar competir con su hija. ¿Lo vivirá así Zaira y Wanda?
La doctora Karyl McBride, autora del libro “Alguna vez será suficiente buena?” detalla que las madres narcisistas pueden ser un verdadero dolor de cabeza para sus hijas ya que las ven como una extensión de ellas y no como un ser independiente. Si a esto se le suma el factor belleza, el problema se agrava y bastante.
Alcanza recordar a Sofía Gala quien comentó hace tiempo que ser hija de Moria Casán no fue nada sencillo. La hija de la diva aseguró en su momento que ella había casi "sobrevivido" a la madre famosa que le tocó y que Moria era mejor abuela que madre. ¡Chan!
Pero estas famosas no son las únicas con problemas dentro del hogar. Lejos del país está el caso de Lindsay Lohan y su hermana Ashley Horn. Ambas son hijas del mismo padre. Sucedió que Ashley se operó para ser parecida a Lindsay y desató una ola de comentarios. Sus operaciones fueron nada menos que cinco y le costaron a la chica unos 25 mil dólares.
“Mi objetivo era parecerme a Lindsay en sus mejores años, cuando tenía 18 ó 19 años”, dijo Ashley a la prensa. "Ahora soy más sensual que Lindsay. No tengo problemas en decirlo", agregó.
Otra relación tortuosa fue la de la estrella Demi Moore y su hija Rumer Willis. En un momento madre e hija estuvieron distanciadas. ¿El motivo? ¡Hombres! Es que luego de su separación con Ashton Kutcher, Demi salió con Harry Morton. Caballero que antes había tenido citas con ¡la hija de Demi y Bruce Willis!
Rumer le pidió a Demi que dejara de ver a este caballero para que las cosas volvieran a la normalidad entre ellas. Algo que nunca pasó.
Otro caso: Charlotte Caniggia y el de Mariana Nannis. Ambas fueron famosas en diferentes momentos por distintos logros. Mariana como la primera botinera y Charlotte como una debutante del Bailando quien luego usó su fama para cantar, desnudarse y tanto más.
Entre ellas la rivalidad no es tan clara ya que Charlotte se operó para parecerse ¡a su madre! Lo inverso que se presenta en otros casos. Aún como flamante mamá, Mariana nunca aflojó a su glamour. Aún cuando se convirtió en una suerte de sombra para Charlotte.
Más: Madonna y su hija. A la reina del pop la han acusado en varias oportunidades de querer eclipsar la belleza de su hija, Lourdes. ¿Cómo? Con sus atuendos diminutos y su cuerpo trabajado. El tema de Madonna son además sus jóvenes parejas quienes la obligan a lucir como una teen. ¿Da o no da?
El recuento termina con Kate Hudson y su madre, Goldie Hawn. La segunda fue famosa actriz y una reconocida dama quien demostró su belleza en muchas oportunidades. Sin embargo Kate pudo salir de las sombras cuando logró la fama gracias al filme "Casi famosos". ¡Bien por ella!
