El presidente Mauricio Macri acercó posiciones ayer con su par francés, Emmanuel Macron, respecto del perfil estratégico de un tratado de libre comercio (TLC) entre el Mercosur y la Unión Europea, pero el dueño de casa ratificó las condiciones que traban el acuerdo.
Macron reconoció sin rodeos que existen fuertes divergencias en torno al ingreso a Francia de los cortes de carne bovina provenientes de Sudamérica.
No obstante, el francés aclaró que encontrar un punto de encuentro en las negociaciones es "técnicamente factible". Por ello, la espera de Macri, principal impulsor de la iniciativa en la Región, se alargó una semana más.
El martes 30 de enero, ministros de Relaciones Exteriores de Paraguay, Uruguay, Argentina y Brasil se reunirán en Bruselas, sede del parlamento de la UE, para retomar las negociaciones.
Francia, mayor productor agrícola y ganadero de Europa, se presenta como el gran escollo para el acuerdo. El Ejecutivo galo quiere proteger su producción.
El portavoz de la Comisión Europea, Daniel Rosario, había expresado horas antes de la cumbre Macri-Macron que aún hay cuestiones por resolver: "Esperamos que la reunión en Bruselas marque el tramo final y allane el camino para posibles pasos posteriores".
Según pudo saber Los Andes de fuentes gubernamentales argentinas, el Mercosur ya aceptó el 100% de las condiciones europeas, pero el viejo continente mostró "una apertura del "92%".
El escollo está aún en el comercio de carne de res y de etanol, asuntos que generan resistencia en Francia e Irlanda. El dueño de casa se refirió a las dudas francesas, que se confirman en las condiciones de exportación de la industria frigorífica.
"Con el Brexit (la salida del Reino Unido de la Unión Europea) debemos estar atentos para no desestabilizar este sector", dijo. "Mis preocupaciones se refieren a la necesidad de estabilidad", insistió Macron
Y luego desvió las tensiones hacia los responsables de hallar una solución. Macron destacó que ni Francia ni la Argentina son los negociadores directos, por lo que todo está en manos del Mercosur y la Comisión Europea.
Macri, optimista
En la conferencia de prensa conjunta en el Palacio del Elíseo, el jefe de Estado argentino destacó la "coincidencia" respecto de que el acuerdo Mercosur-UE es "una gigantesca oportunidad para ambas regiones".
"Por historia, por relación. Basta uno mirar: la mayoría de los inmigrantes que hemos recibido en el Mercosur provenían de Europa", describió Macri ante la atenta mirada de su par francés.
Entusiasmado, Macri dijo que esas "coincidencias" llaman a los dos países a sostener que no pueden perder "esta oportunidad", porque sería darle un salto adicional a la integración que apunta a generar oportunidades.
A pesar de no llevarse una respuesta precisa sobre el pedido sudamericano para que Francia acepte mayores cupos de carne, el Presidente argentino resaltó el encuentro. El Mercosur ofrece 380.000 toneladas de carnes enfriadas y congeladas al año, pero Europa sólo acepta 70.000.
"Las conversaciones del día de hoy fueron muy productivas y esperamos que ante tanta relación, afectado, intercambio cultural y admiración recíprocas la podamos transformar en oportunidades concretas del comercio y las inversiones", insistió Macri.
Y le agradeció a Macron el apoyo a la Argentina para que ingrese a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y aclaró que el país ya está aplicando reglas de esa organización porque "funcionan para llevar bienestar a la gente".
Ante la prensa internacional, Macri le dijo a Macron que el mundo los "desafía" y les pide que pongan "liderazgo" para saber administrar la revolución tecnológica en beneficio de los ciudadanos.
"Tenemos que reducir los miedos, porque los miedos lo único que generan es que prestemos atención a discursos mesiánicos que no van a resolver en absoluto los problemas que tenemos en el mundo. Y cerrarnos es lo peor que podemos hacer. Tenemos que apostar a trabajar en conjunto", enfatizó Macri.
Críticas a Maduro
El presidente de Francia se dijo "favorable" a nuevas sanciones europeas contra las autoridades venezolanas, a las que acusó de una "deriva autoritaria".
Europa ha decidido sanciones individuales contra el gobierno de Nicolás Maduro, con un un impacto limitado. "Deseo que vayamos más allá, teniendo en cuenta las decisiones recientes y la deriva autoritaria" , declaró Macron. Y prometió que a nivel europeo, los países se "coordinarán" para aportar "la respuesta adecuada".
Alineado, Macri expresó que lo único que ha hecho Maduro es "violentar cada vez más el sistema", por lo que el resto de los países "deben exigir una elección libre y transparente en la que los venezolanos se puedan expresar, porque allí hubo un atropello absoluto de las instituciones".
"Tenemos que seguir reclamando por el respeto por los derechos humanos que se han violado en Venezuela. Ese es el camino", concluyó Macri, quien hoy se reunirá con la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y previamente mantendrá un encuentro con el ex presidente de Francia, Nicolás Sarkozy. A la noche retorna a Buenos Aires.