A las 18,27 Elisa Carrió, pegándole pitadas a su cigarrillo, salió de la Quinta de Olivos en remís, donde mantuvo una reunión de más de una hora con el Presidente Mauricio Macri. "Era una reunión pautada desde hace un mes", había aclarado antes la diputada nacional.
Sonó a distracción: ayer el dólar trepaba por arriba de los 28 pesos el día después del recambio de autoridades del Banco Central y todavía permanecía fresca su intervención furiosa al final de la sesión que dio media sanción a la despenalización del aborto y sus críticas al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, a quien acusó de no dejarla hablar. De todo eso también se conversó ayer en Olivos.
Lo cierto es que poco después de la reunión, el Presidente Macri publicó en su cuenta de Twitter una foto junto a Carrió, los dos sonrientes. "Hoy nos reunimos con Lilita y equipo para seguir los avances de Exporta Simple, el programa para facilitar exportaciones de las PyME", escribió.
Poco después, un comunicado de Presidencia de la Nación dio más detalles de la reunión, ratificando el tuit de Macri. Se informó que de la reunión también participaron el jefe de Gabinete Marcos Peña, el ministro de Producción, Francisco Cabrera y el secretario de Comercio, Miguel Braun. Se explicó también que el programa Exporta Simple permitirán "a más PyMEs argentina ganar mercados y así exportar su producción".
Desde la oficina de prensa de Carrió se amplió la versión: además de la reunión por las PyMEs, la diputada también estuvo reunida con el ministro de Defensa Oscar Aguad y otros funcionarios. Tema: "narcotráfico, seguridad y defensa".
“Extraordinaria”, calificó Carrió a la reunión sobre las PyMEs, en la que alertó sobre “la elusión fiscal de las grandes empresas exportadoras”.
Más allá de las "dos reuniones por gestión", Carrió se hizo un espacio para conversar con Peña sobre la coyuntura política. "Hablaron de poder cerrar la grieta interna que se produjo en el interbloque (de Cambiemos), producto de la fuerte discusión de las últimas semanas", comunicaron a este diario fuentes relacionadas a Carrió.
Previo a la cumbre, Carrió había disparado con munición gruesa. Monzó, su blanco. "Nadie me va a quitar el uso de la palabra; y fue enojo con el presidente de la Cámara que no me da la palabra", dijo a la prensa, para explicar su intervención en el recinto el jueves pasado, cuando avisó que la próxima vez rompería Cambiemos. "Sí, es cierto; está molesta con Monzó", se confirmó a Los Andes desde el entorno de la diputada.
También antes de reunirse con Macri pronosticó una baja del dólar "porque es flotante", acaso olvidando que el 11 de mayo pasado había afirmado que el dólar no se movería de los 23 pesos.
La misma Carrió, más allá del proyecto para las PyMEs, le había reconocido al diario La Nación que la reunión serviría para curar nuevas heridas:
"Mauricio me llamó ayer (por el jueves) porque estaba preocupado. Le dije que el problema no era con él ni con Peña, sino con Monzó, que me ignora, es como que no me ve ni me escucha, una verdadera falta de respeto", insistió.
"A lo mejor rompo el interbloque (de Cambiemos) y armo un bloque yo sola así me dan la palabra", agregó. Desde su oficina de prensa se remarcó que Carrió hará todo su esfuerzo por preservar el espacio Cambiemos.
Se pelean, se reconcilian y vuelven a pelear
A fines de marzo de 2016, Macri la citó para aclarar algunas acusaciones que la diputada había disparado contra el presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, a quien había acusado de “interferir en la Justicia”. La reunión fue “dura, franca y muy divertida”, resumió entonces Carrió.
En noviembre de ese mismo año, las críticas de Carrió al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti la hicieron merecedora de otra invitación a Olivos, esta vez a cenar. “El primer plato consistió en sopa de remolacha”, dijo el comunicado oficial sobre el encuentro, sin agregar nada.
A fines de febrero pasado, ya con algunas tormentas asomándose en el horizonte económico del país y con el escándalo del ministro Jorge Triaca y su empleada en negro dominando el verano, Macri volvió a recibir a Carrió en Olivos. Tema: “agenda política y legislativa para el año”, se dijo.
“Es un día con gestos y ese gesto es que estoy en la Casa Rosada. Quiero llevar tranquilidad a toda la Argentina”, sostuvo Carrió el 3 de mayo pasado, cuando fue a ver a Macri en medio de otra corrida del dólar, mezclada con el anuncio de tarifas de los servicios públicos.
El gesto de generosidad que ayudará a mejorar
La co fundadora de Cambiemos y diputada nacional Elisa Carrió (Coalición Cívica) calificó anoche como “un gesto extraordinario” la renuncia presentada a su cargo por el ex presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, y respaldó la designación del Luis Caputo al frente de la entidad.
El jueves, el presidente Mauricio Macri aceptó la renuncia de Sturzenegger y designó al ministro de Finanzas Caputo en su lugar. El movimiento en el gabinete se realizó en medio de una fuerte corrida cambiaria.
Sobre Sturzenegger, Carrió dijo anoche en TN que "la decisión fue de él", y que se trató de “un acto de generosidad muy importante el que tuvo, para mejorar la situación actual en términos macroeconómicos”.
“Por otro lado, creo que la designación de Caputo da garantía en el exterior”, completó la líder de la Coalición Cívica-ARI.