El oficialismo y la oposición polemizaron hoy respecto de la política a seguir para negociar con los holdouts, ya que el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, le reclamó al Gobierno que "arregle el tema" con los fondos buitre "antes de irse", en tanto el ministro de Economía, Axel Kicillof, sostuvo que el PRO "revirtió" su discurso sobre el tema y "ahora habla de negociar duramente".
Al respecto, Kicillof, precandidato a diputado por el Frente de la Victoria aseguró que "el gran problema" respecto de una negociación con los fondos buitre es que "nunca pidieron algo razonable". Por su parte, Macri, precandidato presidencial del PRO, sostuvo que en caso de ser electo y, en consecuencia, ser quien tenga que cerrar la negociación con los holdouts que no adhirieron al canje de deuda, "claramente" no pagará lo que considere "injusto".
"Claramente no voy a pagar lo que piense que es injusto. Nunca voy a hacer algo que me parece que no corresponde. Lo que tampoco voy a hacer es gritar y no arreglar las cosas", precisó.
"Ellos (por los funcionarios del Gobierno) nos dijeron que habían arreglado el tema de la deuda. De golpe, nos desayunamos con que habían arreglado con el 92 y que el 8 por ciento se había convertido en un problema. Ellos eligieron ir a pleitear a unos tribunales donde perdieron sistemáticamente y no lo terminan de resolver", se quejó en una entrevista con radio Blue.
Indicó que "lo que espero es que este gobierno arregle el tema antes de irse y nos saque del problema, negociando lo mejor posible. Espero que mejor que lo que hicieron con el Club de París: fueron, arreglaron y pagaron el doble de lo que se tenía pagar por hacerse los malos".
Precisó que, en caso de tener que negociar, lo hará "desde la mayor dureza posible, como lo he hecho toda mi vida. Por algo me pusieron 'el cartonero Báez'", durante su gestión como presidente del club Boca Juniors.
"Cuando tengo que administrar algo que no es mío, yo tengo que ser muy estricto, muy cuidadoso. Hacerse el generoso con lo que no es de uno, es fácil. Desde el primer momento dije que hay que ir y negociar y no caer en esta situación que digan que sos incumplidor", continuó.
Por su parte, Kicillof se mostró esperanzado en que los principios para la reestructuración de las deudas soberanas que tratará las Naciones Unidas obligue a los fondos buitre a pedir "algo razonable", que permita llevar adelante una negociación con los tenedores de bonos de deuda defaulteada que no ingresaron al canje y que litigaron contra la Argentina.
En ese sentido, sostuvo que "hay unanimidad internacional contra los fondos buitre" y opinó que el gran impedimento para que no se haya alcanzado un acuerdo que le permita a la Argentina salir definitivamente del default es que esos fondos "nunca pidieron algo razonable".
Acerca de la negociación con los holdouts, Kicillof marcó también un cambio en el discurso en el partido que lidera el jefe de Gobierno porteño y candidato a presidente, Mauricio Macri, al indicar que "hoy el PRO, que decía que había que pagar cualquier cosa, está diciendo que hay que negociar duramente, que es nuestra posición".
"Los que decían que había que pagar a los buitres lo que pedían resultaron ser parte de la extorsión y todos los que acompañaron esa posición hoy están revirtiéndola", afirmó el jefe de la cartera económica.