Con los primeros datos oficiales Mauricio Macri ya aparecía como ganador del primer balotaje de la historia argentina y los cómputos nunca se alteraron a medida que se sumaban mesas escrutadas. Al cierre de la edición, el candidato del Frente Cambiemos obtenía 51,42% de los votos (con el 99% de las mesas escrutadas), tres puntos más que su rival del Frente para la Victoria, Daniel Scioli. Así, puso fin a 12 años de kirchnerismo.
La diferencia de casi 800 mil votos demuestran que algo se quebró en la Argentina desde hace cuatro años. En 2011, Cristina Fernández ganaba la elección con el 54%, es decir apenas tres puntos mas de los que sacó ayer el candidato de Cambiemos.
Hay todo tipo de análisis posibles. El primero, que la campaña del miedo y la amenaza de ajuste y devaluación agitada por el oficialismo no lograron torcer la voluntad de cambio manifestada el 25 de octubre, cuando la mayoría de los votos fueron a alternativas opositoras. Scioli había ganado en la primera vuelta con casi el 37% de los votos, contra el 34% de Macri; evidentemente la estrategia de Macri para captar votos de otros candidatos fue más eficaz.
Además, ayer volvió a confirmarse uno de los mitos más antiguos de la Argentina: otra vez un gobernador de la provincia de Buenos Aires no pudo llegar a la Presidencia de la Nación; así volvió a cobrar vigencia la supuesta maldición de Julio Argentino Roca a Dardo Rocha.
A las 19.20, el ministro de Justicia Julio Alak salió a dar detalles de la elección y mientras decía que en todo el país había votado el 78% de los empadronados (finalmente superó el 80%), el sitio web de la Dirección Nacional Electoral publicaba los primeros cómputos oficiales. En ese momento, con apenas 754 mesas escrutadas, Macri se alzaba con el 53%.
Minutos después, en el búnker del FpV, instalado en el Hotel NH de la Ciudad de Buenos Aires, el titular de la Anses Diego Bossio hablaba de cautela: “Estamos viendo que hay una muy buena elección del Frente para la Victoria”.
A las 19.35, los cuatro gobernadores electos de Cambiemos pisaron el escenario del búnker de Macri, en Costa Salguero: la bonaerense María Eugenia Vidal, el porteño Horacio Rodríguez Larreta, el jujeño Gerardo Morales y el mendocino Alfredo Cornejo plantaban las banderas de la victoria del frente opositor.
A Cornejo le tocó anunciar la victoria de Macri en el balotaje: “Nos merecíamos una democracia con alternancia. Hemos dado un gran paso eligiendo a Mauricio Macri presidente de la Argentina”.
Luego tomó la palabra Vidal: "Este es el encuentro de la Argentina que defendió su dignidad y no se sometió".
Morales tuvo unas palabras para los fiscales del Frente: "Hay que cuidar cada voto porque es cuidar la voluntad del pueblo argentino".
Rodríguez Larreta cerró el anuncio oficial de la victoria opositora: "Gracias a los argentinos que acompañaron y a los que no. Mauricio va a gobernar para todos. Hoy la gente votó Cambiemos".
Dos horas después, a las 21.30 salió al escenario del hotel NH Daniel Scioli a reconocer la derrota. Dijo que “ha sido elegido por la voluntad popular al ingeniero Mauricio Macri, a quien acabo de saludar por teléfono”; luego agradeció a los más de 10 millones de argentinos que lo acompañaron con su voto. El candidato derrotado dio un largo discurso, en el que volvió a rescatar, como en la campaña, los doce años de gestión kirchnerista.
Entonces fue el turno de la acción en el búnker de Cambiemos. Subieron las principales figuras del frente opositor; estaban otra vez Cornejo, Vidal, Morales y Rodríguez Larreta, también Ernesto Sanz y Elisa Carrió, entre otros.
Quien tomó la palabra fue la ahora vicepresidenta electa Gabriela Michetti, quien reiteró que Cambiemos "gobernará para todos, porque necesitamos paz, necesitamos amor y más unión" y entonces dijo "tengo el enorme honor, el enorme orgullo de presentar al presidente de los argentinos" y entró Macri al escenario.
"Es un día histórico, un cambio de época. Este cambio no puede detenerse en revanchas o ajuste de cuentas", decía y luego aseguraba que deseaba trabajar con los países latinoamericanos. Entonces, el presidente electo dijo: "Ustedes hicieron posible lo imposible con su voto".
Como sucedió en los comicios del 25 de octubre, la clave de la victoria de Macri estuvo en el resultado obtenido en los distritos electorales más populosos de la Argentina. En Ciudad de Buenos Aires, el presidente electo obtuvo el 64,78% de los votos, contra 35,22% de Scioli. En Santa Fe, Macri sacó el 55,78% contra 44,2% del candidato del FpV. En provincia de Buenos Aires, Scioli ganó, pero con una diferencia de apenas 200 mil votos: 51% a 48,9%.
Córdoba le dio sustento a la candidatura de Macri con una enorme diferencia respecto de Scioli: 71,60% contra 28,40%.
En Mendoza, Cambiemos volvió a demostrar su supremacía sobre el FpV este año: fue 57,55% contra 42,45%, ampliando seis puntos la diferencia de la primera vuelta de octubre.
Cristina lo recibirá mañana
La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, se comunicó anoche telefónicamente con el candidato de Cambiemos, Mauricio Macri, para “felicitarlo” tras resultar electo como su sucesor en el balotaje y lo recibirá mañana a las 19 en la residencia oficial de Olivos. En tanto, hoy, la jefa del Estado recibirá a las 18 a la fórmula del oficialismo Daniel Scioli y Carlos Zannini, también en la residencia.
Así lo informaron oficialmente fuentes de la Casa de Gobierno, que detallaron que “Cristina Fernández llamó telefónicamente a Macri, lo felicitó por el resultado” mientras que indicaron: “Macri la felicitó a Cristina porque fue una jornada democrática ejemplar”. “La Presidenta le mandó saludos a todo su gabinete y a su esposa Juliana Awada, que va a ser su primera dama”, contaron.
Festejos en el país
Los festejos por la victoria de Mauricio Macri en el balotaje presidencial se repitieron en las principales ciudades del país. El más numeroso fue en la Ciudad de Buenos Aires, donde la gente se concentró en la Plaza de la República, al pie del Obelisco. Allí, vivaron por “el cambio” y corearon que el “kirchnerismo no vuelve nunca más”.
"Hay que saltar, hay que saltar, ganó Mauricio el ballottage", gritó la multitud.
En Mendoza, el festejo unió a radicales y macristas en San Martín y Peatonal. Allí se congregaron un par de centenas de personas, a quienes se unieron los automovilistas tocando bocina a su paso.