Mauricio Macri apostó por un cierre de campaña más íntimo y también más efectista. El candidato del Pro prefirió saturar las redes sociales -Twitter, Facebook e Instagram- con su fotografía y el mensaje “Yo lo Voto” a llenar grandes estadios.
El contacto directo con sus simpatizantes fue breve, no duró más de 15 minutos, y se dio anoche en la pequeña cancha cubierta del Club Asturiano del partido bonaerense de Vicente López luego de una recorrida por barrios de la zona. Descontracturado, Macri les dio a fiscales de mesa de su partido algunos tips para “cuidar el voto”, a la vez que lanzó críticas al Gobierno nacional.
“¿Subieron la foto a Facebook? ¡Somos trending topic mundial!”, les dijo a sus simpatizantes. En bambalinas, los estrategas de la campaña de Macri estaban chochos.
Entre las 16 y las 20 se registraron más de 89 mil tuits en la red social del pajarito azul con el hashtag #YolovotoaMM. El tema llegó a posicionarse como el más comentado en Twitter Argentina y se convirtió en tendencia global. “En la misma franja horaria” -acotaban los asesores de Macri- “Scioli tuvo 14 mil menciones con su hashtag #MiVictoria, les ganamos por paliza”.
“Los argentinos queremos un gobierno que nos ayude a realizar nuestros sueños, no que nos dé pesadillas como nos pasa hoy”, lanzó Macri desde un pequeño escenario, rodeado por unos 300 fiscales de la zona norte del conurbano bonaerense que lo escucharon embelesados mientras le sacaban fotos.
“La Presidenta nos ha dejado la enseñanza de que no hay que obsesionarse con escribir la historia, por el contrario, creo que hay que obsesionarse por construir el presente. Y nos ha enseñado que por hablar más no se tiene la razón”, dijo el jefe de Gobierno porteño. “Les propongo liderar el mejor equipo de gobierno de los últimos 50 años”, agregó y recibió aplausos.
Suspenso y consejos
Antes de que Macri arribara al centro de la cancha cubierta del Club Asturiano, la concurrencia debió aguardarlo unos instantes. Gabriela Michetti, su candidata a vicepresidenta, lo había presentado arengando al público a que gritase: "¡Se siente, Mauricio presidente!". Pero el candidato principal se demoró y hubo nerviosismo en el escenario.
Una vez que ingresó, buscó establecer desde el primer instante contacto con los simpatizantes para reforzar uno de los pilares de su campaña, ese que dice que es un hombre como cualquier otro.
Al final de su breve discurso, Macri dio consejos a sus fiscales esforzándose por resultar canchero. “Se tienen que levantar a las 6 y a las 7 tienen que estar en la escuela. El sábado no se vayan de joda”, les dijo jocosamente. “Tenemos que llegar, saludar a todos y decirles que estamos ahí para contar los votos y que no nos vamos a ir aunque nos pongan mala cara”, agregó.
Entre los tips que les dio, uno se destacó: “Se quedan hasta que la planilla esté firmada y le sacan una foto”. Después, arremetió contra el Frente para la Victoria (FpV). “Hacen actos en Tecnópolis, todo muy moderno, pero el sistema de votación que sostienen es arcaico y tramposo y el deporte es robarse boletas”.
Cuando terminó de hablar, Macri se abrazó con Michetti y sus candidatos bonaerenses, María Eugenia Vidal (a gobernadora) y Fernando Niembro (a diputado nacional), entre otros. Los ya tradicionales globos de colores danzaban por el aire.