Nada está definido. Así paró la pelota ayer el presidente Mauricio Macri cuando fue consultado sobre si tiene decidido quien será su compañero de fórmula para buscar la reelección en octubre o al menos a quién se lo va a proponer.
Faltan siete meses para las elecciones, pero sólo poco más de dos meses para que el 12 de junio se presenten las alianzas y el 22 de junio venza el plazo para las listas de precandidatos para las PASO ante la Junta Electoral Partidaria.
Desde hoy restan 69 días para que el PRO, la UCR y la Coalición Cívica decidan si Cambiemos continuará tal como está conformado ahora o no. Y los radicales vienen pidiendo pista, no sólo para cargos sino también para espacios de poder real y toma de decisiones.
De visita en Entre Ríos, Macri descartó al menos una hipótesis que venía sobrevolando el escenario: la bonaerense María Eugenia Vidal no competirá a nivel nacional e irá por su reelección en el distrito más populoso del país. "Vidal es tan buena que la queremos poner en todos lados, pero ella tiene que ser candidata a gobernadora", dijo el mandatario nacional en una conferencia de prensa brindada en la ciudad de Gualeguaychú.
El jefe de Estado desdramatizó el cruce de opiniones que el PRO viene teniendo con algunos dirigentes radicales, principalmente aquellos que se mantuvieron críticos de las políticas adoptadas desde el principio de la gestión.
"Cambiemos nació semanas antes de la elección del 2015. Todos pronosticaban que no iba a llegar ni a la elección. Tuvimos una interna y un crecimiento que continuó gobernando. Se consolidó Cambiemos", enfatizó el mandatario.
En ese sentido, sostuvo que la relación interna de la coalición goza de buena salud a pesar de algunas diferencias de opiniones y afirmó que existe un presente en el que las tres fuerzas colaboran con el Gobierno que él lidera.
"Siento que con el radicalismo y la Coalición Cívica hemos sorteado dificultades como las peores que le ha tocado sortear a la Argentina en estas décadas. Y acá estamos, trabajando juntos con un enorme compromiso de llevar adelante esta agenda de transformación que la Argentina necesita", expresó.
Ante la consulta de este diario, ayer en la Casa Rosada ratificaron que el PRO no le ofrecerá la vicepresidencia al radicalismo. Pero sí está abierto a analizar si la UCR propone un postulante. La danza de nombres ya está activa. Más cerca de los radicales suenan los nombres de dos mendocinos: Ernesto Sanz y o la vicegobernadora Laura Montero.
En las filas del PRO, en tanto, alimentan la idea de que la fórmula puede volver a ser pura, con Patricia Bulrrich o Carolina Stanley, abriendo el juego a los radicales a través de algunos ministerio.