por Rosendo Fraga - Analista político. Especial para Los Andes
Tras conocerse el resultado definitivo de las PASO, de hecho se lanza la campaña electoral para el 22 de octubre, con condiciones políticas y económicas que favorecen al gobierno. No hubo ningún cambio sustancial sobre lo conocido previamente. Cambiemos ganó en 10 distritos y en los restantes 14 lo hacen vertientes del Peronismo o sus aliados. En Buenos Aires, se impuso por 0,21% Cristina Kirchner, como ya lo adelantaron tanto la Gobernadora de Buenos Aires (Vidal) y su primer candidato (Bullrich). La discusión está en el resultado nacional, sobre el cual el gobierno nunca informó. La realidad es que la suma de Cambiemos ronda el 40% de los votos (los que llevan esta denominación en 23 distritos más la lista Vamos Juntos de Caba) y los candidatos definidamente kirchenristas suman aproximadamente 22%. Cristina se declara ganadora no sólo en Buenos Aires, sino también en el total nacional. Ella presenta una cuenta de acuerdo a la cual Cambiemos tuvo 37% en todo el país y ella 38%. Para ello, suma al mencionado 22%, más de tres cuartas partes del 20% que votó a candidatos peronistas no-kirchneristas en las provincias. Tanto en términos políticos como económicos, el oficialismo avanza hacia la elección con ventaja. El crecimiento se afianza y mantiene la iniciativa.
Macri se mueve rápidamente buscando consolidar su triunfo, pero sin descartar la negociación con sus adversarios. Aparenta enfrentar al sindicalismo, pero en realidad toma posiciones para negociar desde un lugar de fuerza. Los nuevos funcionarios en la Secretaría de Trabajo (Pitrau) y en la Superintendencia de Servicios de Salud (Taricco) -que maneja el dinero de las obras sociales- implica que llegan quienes ocupaban cargos en la segunda línea, pero más vinculados al Ministro de Trabajo (Triaca) que sus antecesores. Pero no se trata de funcionarios con perfil “anti-sindical. Al mismo tiempo es designado como Vice-Ministro de Salud (Aruachan) alguien vinculado al equipo de uno de los sindicalistas más importantes (Lingieri). Avanza la investigación sobre el gremio marítimo, siendo detenido su número dos (Morato). Pero hasta ahora es el único sindicato que ha logrado intervenir Macri durante su gobierno. Su modelo -como lo explicita- es el acuerdo entre el gobierno, empresarios y sindicatos, al estilo del logrado en el sector petrolero en Vaca Muerta y otros sectores, pero no tiene una política de confrontación como la que intentó sin éxito Alfonsín en 1984. Donde aparece una decisión más firme de ejercer el poder es en el ámbito judicial. La justicia federal -el fuero políticamente más cuestionado- es donde recibe respuesta más rápida. Las diversas causas que afectan al Kirchnerismo y en particular a Cristina Kirchner han comenzado a moverse con gran rapidez. Con una velocidad menor, algo similar tiene lugar en el fuero contencioso administrativo. La Suprema Corte actúa con su equilibrio político característico. Permitió al oficialismo avanzar sobre el camarista Freiler, pero frenó a la Cámara Electoral con la inhabilitación de la candidatura de Menem y posterga la decisión sobre el reclamo de Vidal sobre la coparticipación.
El Peronismo por su parte está reaccionando como conjunto, aunque le falte un liderazgo unificado. La movilización de protesta sindical mostró la articulación de un polo de oposición social, más allá de sus internas. La CGT, las dos vertientes de la CTA y los Movimientos Sociales moderados tienen ahora como referencia la reunión del Comité Central Confederal de la central obrera peronista convocado para el 25 de setiembre, que decidirá si avanza o no en un plan de lucha a menos de un mes de las elecciones. Los gobernadores por su parte volverán a reunirse esta semana, para definir la estrategia en el conflicto con la provincia de Buenos Aires entorno a la distribución de la coparticipación. Convergen en reclamar que no se aumente la cuota de Buenos Aires a costa de las demás provincias. Los 19 gobernadores que no pertenecen a Cambiemos, convergen en esta posición. Pero es en el Congreso donde el Peronismo ha mostrado el mayor grado de coincidencia. El 23 de agosto en el Senado, por 39 votos (todos los bloques opositores juntos) a sólo 9 de Cambiemos, se dio media sanción a la ley de ciencia y tecnología, por la cual se aumenta gradualmente el presupuesto para esta área, hasta llegar al 3% del PBI en 2030. El proyecto tendría sanción definitiva en diputados. Ello obligaría a Macri a vetar la ley. También la semana pasada, todos los legisladores peronistas en conjunto, en la Comisión de Trámite Legal Parlamentario, rechazaron dos DNU del Presidente: el de los créditos Argenta y el que pasa la Secretaría de Deportes a la Presidencia de la Nación.
En la segunda quincena de agosto, dos imponderables irrumpieron: la violencia política en diversas manifestaciones y un imprevisto conflicto con los EEUU por el biodiesel. En la capital bonaerense, en una protesta política fue atacado el Ministerio de Seguridad y al mismo tiempo, estallaron dos autos frente al mismo edificio. En dicha protesta convergieron dirigentes de la comunidad mapuche reclamando por el caso Maldonado; también grupos anarquistas violentos -son la manifestación local de los que reclamaron violentamente contra el G20 en Hamburgo- y carteles de Montoneros, el grupo guerrillero local de los años setenta. Pero el estallido de los autos parece vinculado a las purgas realizadas en la Policía Bonaerense, ya sea la exoneración de condenados por violaciones a los derechos humanos o el medio centenar de jefes pasados a retiro recientemente. A ello se sumó la transitoria desaparición de un policía asesor del Ministro de Seguridad bonaerense (Ritondo) quien el año pasado promovía huelgas en la Policía Bonaerense. En el plano internacional, la supuesta desaparición de Maldonado -de la cual los mapuches y las organizaciones de derechos humanos acusan al Ministerio de Seguridad y la Gendarmería- está generando creciente presión internacional. La decisión de la Administración Trump de aumentar los aranceles al biodiesel de Argentina, llevó al Presidente Macri a enviar una nota de protesta al Vicepresidente estadounidense (Pence) y al canciller a citar al Encargado de Negocios de la Embajada de EEUU, para expresarle el malestar argentino. Al mismo tiempo, China ampliaría compras de aceite de soja y carne de Argentina y se busca a Europa como nuevo cliente.
En conclusión, cuando faltan 50 días para la elección, puede anticiparse que la polarización continuará, sobre todo en la provincia de Buenos Aires, pero el caso Maldonado plantea que la grieta política puede derivar a lo ideológico.
