No hay dudas de que el desempeño que tuvo el handball argentino en los Juegos Panamericamos Toronto 2015 fue más que positivo. Tanto varones como las chicas consiguieron medalla de plata y el boleto a los Juegos Olímpicos de Río 2016. Pero fundamentalmente para el Seleccionado argentino femenino, La Garra, este logro fue histórico porque nunca se había conseguido tal clasificación hasta ahora.
De este hecho histórico formó parte la mendocina Macarena Sans, del Club Mendoza de Regatas, que siendo la más “peque” del Seleccionado nacional (18 años) tuvo un papel importante en el equipo conducido por Eduardo Peruchena, además de que tiene un futuro inmenso para afrontar una agenda completa de torneos internacionales con la mayor, además de su categoría, la junior.
Macarena Sans, no sólo debutó con La Garra sino que vivió una de sus mejores experiencias deportivas. Y en exclusiva para Más Deportes on line, contó cómo fueron sus momentos en Toronto y todo lo que significó vestir la camiseta albiceleste.
“Es la primera vez que estoy en los Juegos Panamericanos y qué mejor que con el logro de clasificar para los Juegos Olímpicos de Río 2016. Fue una experiencia inolvidable en todo los aspectos”, confió la mendocina.
Y agregó: “Anteriormente participé en Sudamericanos, Panamericanos y Mundiales de handball (de cadetes, juniors, juveniles) pero esto es totalmente distinto. Estábamos compartiendo la Villa con todos los deportistas argentinos y de otros países. Todos en un mismo lugar, y contactarnos e interactuar con todos ellos fue único. Superó mis expectativas”.
-¿Qué análisis hacés de la actuación de La Garra?
-El objetivo inicial fue ganar todos los partidos de la zona para terminar primeros y evitar cruzarnos con Brasil, para definir el pase a la final con México. Perdimos con Cuba y el mundo se nos vino abajo. Pero después se produjo el triple empate en la zona y rezábamos para que Uruguay venciera a las cubanas. Así fue y Argentina quedó primera por diferencia de gol. Recién ahí respiramos, porque cuando caímos con Cuba todo fue horrible. Ni ganas de salir teníamos. Después nos morimos de alegría al saber del triunfo de Uruguay.
Si bien, la semifinal fue viable para Argentina, la final contra Brasil no dejó de ser soñada. Fue contra las campeonas del mundo y estuvieron muy cerca de cortar con el poderío brasileño.
“En el Panamericano de handball en Cuba (clasificatorio para el Mundial de handball), las chicas (yo no estuve) perdieron por 15 puntos. Y en estos juegos lo hicimos por 5 goles. Esto deja claro el crecimiento que tuvo este equipo. El objetivo era terminar bien en este torneo. Jugar bien en la final y por un momento creo que hasta el técnico se sorprendió, porque tuvimos un primer tiempo muy bueno (12-12). En el segundo entramos como dormidas, tuvimos un bache, y si bien al final lo remontamos, no nos alcanzó”, explicó Sans.
-¿Cómo se le planteó el juego a Brasil?
-Entrenamos un plan de juego bastante claro que era mantener la posesión del balón y atacar lo más largo posible, evitar que salgan de contragolpe -porque esa es el arma letal de las brasileñas- y asegurar el gol. En la final de Toronto eso se cumplió en el primer tiempo.
Lo histórico de La Garra no fue solamente que haya conseguido la clasificación a Río 2015, sino el impacto que tuvo en nuestro país luego del gran desempeño en ambas ramas. Ahora, al igual que Los Gladiadores, con esta gloriosa medalla de plata, el handball argentino en la rama femenino tomó más protagonismo que nunca, aunque las protagonistas aún no son consciente de lo que produjeron.
“Aún no caemos de lo que se logró y el impacto que todo esto puede tener. Sólo pensamos que esto se nos tenía que dar para que el handball femenino siga creciendo. Estamos en un proceso como en algún momento tuvieron Las Leonas hasta llegar a consolidarse a nivel internacional. Queremos seguir entrenando y trabajando para dar el salto. Cuando llegué la gente me hizo comentarios, incluso de personas que nunca siguieron al handball. Creo que la gente sabía de esta oportunidad que teníamos y había muchas expectativas", argumentó la jugadora con medalla de plata.
"Creo que esto es un modo de reconocernos y hacerlo para el handball argentino. Este logro es el resultado de todo el esfuerzo a todo lo que veníamos haciendo. Y a su vez es un empujón anímico para continuar entrenando y concentrar para lo que se viene", aseguró Macarena Sans.
-¿Qué se viene en el Seleccionado Argentino?
-En noviembre hay un Cuatro Naciones en Brasil. Justamente, Brasil nos invitó para jugar contra ellas y dos potencias europeas, que es Hungría y la otra aún no está confirmada pero podría ser Alemania o Dinamarca.
Lo positivo de esto es que Brasil se interesó en invitarnos y eso es muy bueno para nosotros porque a nivel internacional hemos obtenido un reconocimiento mayor. Este Cuatro Naciones nos ayudará para tener mayor roce con estas potencias del handball y aprender más. Luego, finalizamos el año (a mediados de diciembre) con el Mundial en Dinamarca.
-¿Y en lo personal?
-Mi agenda para el próximo año está complicada. Estoy en primer año de juniors y tenemos un Mundial y un Panamericano cerca de los Juegos de Río. Igualmente seguiré entrenando duro como hasta ahora porque aún no me dicen hacia dónde tendré que enfocarme, si en el junior o en Río con la mayor. Veré a medida que pasa el tiempo.
Macarena Sans, que comenzó siendo parte del Prohand, luego en seleccionados provinciales y nacionales, ahora es una pieza fundamental de La Garra. Con sus 18 años, tiene muchos años por recorrer y portar la celeste y blanca. Aunque "la peque" ya dio un salto gigante.
