Macarena Sans debutó este año en el seleccionado argentino mayor de balonmano, La Garra, superando expectativas y cerrando el año con ganas de más. La armadora del Club Mendoza de Regatas es la más joven (categoría junior) del equipo que conduce Eduardo Peruchena, sin embargo se ganó el cariño y un lugar indiscutido en el elenco albiceleste.
Con sus 19 años recién cumplidos, sabe muy bien lo que quiere en su vida deportiva y principalmente con el seleccionado: "Quiero continuar en los seleccionados (junior y mayor), entrenar, exigirme, para que Argentina llegue a su punto máximo. Estoy segura que en el próximo mundial pasamos de ronda", aseguró convencida la mendocina.
Desde su debut en los Juegos Panamericanos de Toronto, donde se consagraron subcampeonas y clasificaron históricamente para los Juegos Olímpicos de Brasil 2016, hasta este último Mundial en Dinamarca, "Maqui" pasó por etapas que pudo superar y analizar en profundidad. En ese proceso se fue motivando para continuar creciendo y ofrecer todo su potencial a La Garra.
En diálogo exclusivo con Más Deportes, la "Peque" del seleccionado argentino (que marcó otro precedente en el historial del handball argentino al superar el mejor puesto en mundiales -19° en Serbia 2013- con el 18° lugar en Dinamarca), hizo su balance de este torneo de fin de año y de lo que se viene para el próximo.
"Al principio no pensé que iba a quedar en la lista de Toronto, porque en los torneos anteriores (la gira de Hungría y el Panamericano de Cuba) no fui. Después de eso, le planteé al técnico: si tenía un tanto por ciento de posibilidades de ir a Toronto, me la juego (desplazando otras prioridades como la facultad) y cuando me contestó que las tenía, puse todo de mi, entrenando más fuerte, viajando, y cuando confirmó la lista sentí una felicidad muy grande", contó sobre su primera gran noticia.
Luego, Sans comenzó a transitar por sensaciones inesperadas y "sorprendentes, porque Toronto fue de muy alto nivel, en cuanto a organización, competencia, equipos. Superó expectativas, pese a que fue una competencia con equipos de América sin tantas potencias salvo por Brasil y Cuba. Pero al clasificar para Brasil 2016 cumplimos con un sueño enorme de todo el handball femenino".
Después, el Mundial en Dinamarca, con previa gira por Brasil, la experiencia fue muy diferente. Argentina comenzó con un triunfo en este certamen ecuménico ante el Congo (23-15). Pero la serie de derrotas posteriores sirvió más de fortalecimiento que de desilusión, por significarse de seleccionados que siempre pelean los primeros puestos.
Argentina se planteó mejorar la posición anterior (19°) y si se podía, pasar de ronda. Pero el grupo C fue extremadamente fuerte.
"Congo fue accesible, pero el resto de los equipos fueron muy difíciles. Después de este mundial, lo que nos quedó fue la experiencia de sumar partidos, seguir creciendo y llegar a ser potencia", confió Sans.
Con Alemania (33-13), que perdió en octavos de final ante Noruega, "nos mataron. No lo disfruté. Fueron muy superiores a nosotras. Argentina se agarró fuerte defensivamente, seguimos adelante pero no tuvimos opciones. Fue un golpe porque sabíamos que Alemania no había clasificado por mérito para este Mundial, fue invitado; y había perdido con Francia por 15 goles. Y nos ganaron por sus lanzamientos desde afuera".
Con Francia (20-12), quedó eliminada en cuartos, "fue una derrota muy positiva porque es potencia y sólo nos hicieron 20 goles. Fue un partido de defensa contra defensa.
Contra Brasil (23-19), que perdió en octavos, jugamos muy bien. Ibamos siempre abajo, pero a 5 minutos de finalizar el partido nos pusimos a 2 goles. Lo bueno de este partido es que estamos acortando las diferencias con un equipo, que si bien lo conocemos, Argentina juega siempre contra las brasileras, pero son las campeónas mundiales anteriores. De ellas se aprende muchos, hay mucho respeto y es mutuo", explicó Maqui.
Frente a Corea del Sur (29-22), que se quedó en octavos, era el partido clave porque "si ganábamos pasabamos de ronda". La junior fue una de las más valiosas en este encuentro. Sacó La Garra de adentro, pese a su continuo llanto en los últimos minutos del encuentro, incluso mientras jugaba.
Así lo contó Macarena Sans: "al final aflojé. Pasa que llegué a esta selección con otra mentalidad que mis compañeras más grandes. Mi esperanza era ganar y pasar de ronda. Soy consciente que no somos potencias pero tenía mucha confianza de que podíamos sacar este partido, era nuestra última chance. Corea había perdido con Alemania y empatado con Brasil y Francia. Me dio impotencia de ver que ibamos perdiendo. Por eso la angustia", aseguró.
Y agregó: "Antonella Mena y Lucía Haro trataban de animarme y yo no paraba de llorar. Y a los 5 minutos me llamó el técnico: "Maquita entrás". estaba en la cancha y seguía llorando (risas). Encima metí dos goles", afirmó.
-¿Y qué conclusión sacaste de esto?
-Que quiero volver, entrar y jugar. Y que Argentina llegue a su punto máximo. Fue un envión para mi. Me enfrenté con la realidad pero nunca pensando que somos inferiores sino que podemos crecer y llegar más alto. Nos entrenamos muchas horas por día, en el caso de Haro y yo que somos del Interior del País, viajar distancia y cumplir con todas las rutinas, dejando toda nuestra vida por el seleccionado. Me dio mucho estímulo y creo que para el próximo mundial pasamos de ronda".
Contra Puerto Rico se jugó por la Copa Presidente del puesto 17 al 22) y se ganó pero con China no.
"Con China fue el último partido de 7 que jugamos en este mundial, el último del año, muy difícil. Sumado a la gira previa, fue muy pesado en lo físico, anímico y mental", confesó la jugadora de Regatas.
-¿Qué creés que se debe cambiar en este seleccionado?
-Además de partidos contra potencias, y apoyo para llevar esto a cabo, creo que los objetivos que se plantea. Nosotros queríamos pasar de ronda pero no se hizo énfasis en eso sino en mejorar de puesto y en crecer paso a paso. Siento que necesitamos que se nos impongan metas más exigentes. El año pasado, en el Mundial de juveniles en Macedonia, Argentina también hizo historia pasando de ronda pero desde un principio la técnica planteó eso y nos convenció, y se logró.
-¿Qué te gustaría que pase en esta selección para el próximo año?
-Quiero que en los próximos torneos la Selección confíe en si para dar el paso que todavía no damos. Hacer el click en el equipo. Muchas cosas dejamos de lado las jugadoras, le dedicamos muchas horas de entrenamiento y hay que jugarsela más. Con la experiencia en Juveniles me di cuenta que se puede. No quiero conformarme con mejorar de puesto. En lo personal, el año próximo tengo el Panamericano de Junior y el Mundial de la misma categoría, además de los Juegos en Brasil. Creo que juego en junior y sueño con estar en los Juegos Olímpicos.
-¿Y sobre tu postergada vida personal?
-La vida del deportista es postergar, por eso el año que viene quiero priorizar la facultad (le restan cuatro materias del primer año de Educación Física) para terminarla y ver si me voy a jugar afuera (Europa). El seleccionado motiva mucho, uno aprende a tener empuje en todos los aspectos de la vida. El día que deje de tener esa "garra", dejo el deporte.
Vale agregar que Macarena Sans fue premiada como mejor jugadora de balonmano del año 2015 por Diario Los Andes y la Comede (Confederación Mendocina de Deportes) con los Premios Llama.
