El 1° de noviembre se aplicará el último aumento de la tarifa eléctrica del año. Según estimaciones del Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE), la suba tendrá un impacto de entre $ 25 y $ 116 en las facturas del 60% de los usuarios mendocinos.
Los que menos incremento tendrán serán los usuarios residenciales con un consumo de hasta 299 kilovatios-hora (KWh) bimestrales (categoría T1-R1).
De acuerdo a los cálculos del EPRE, sus facturas subirán unos $ 25. Dentro de ese grupo hay 179.000 hogares, que representan el 30% del total.
Será mayor la suba para los usuarios que consumen entre 300 KWh y 599 KWh bimestrales (categoría T1-R2). El incremento estimado para ese grupo es de $ 116, en comparación a lo que pagaron hasta octubre.
Hay 187.000 hogares en esas rango de consumo. Entre las dos categorías mencionadas suman 366.000 usuarios, lo que representa al 60% del total.
Por su parte, los usuarios residenciales que gastan más de 600 KWh por bimestre, tendrán un incremento aproximado de $ 390 en sus facturas. Hay 147.000 hogares mendocinos en esa categoría (24% del total).
Elián Japaz, titular del EPRE, comentó que resulta “difícil determinar qué impacto en pesos tendrán los usuarios no residenciales, porque sus consumos son muy diferentes”, pero aclaró que “sí es posible determinar la suba porcentual que tendrán sobre sus facturas”.
Los 72.000 usuarios comprendidos dentro de la categoría de Pequeños Comercios, como bancos, restaurantes y supermercados, tendrán un aumento del 20,4% en sus facturas.
Los usuarios Industriales (hipermercados, bodegas, petroleras), deberán pagar a partir de noviembre un 22,3% más. Por su parte, los usuarios que reciben el servicio eléctrico para riego agrícola, tendrán que enfrentar una suba del 18,3%.
Por qué sube la luz
Para entender exactamente de qué se trata el incremento, es necesario repasar cómo está conformada la tarifa. El monto que pagan los usuarios está formado por tres ítems: el Costo de Abastecimiento y Transporte, el Valor Agregado de Distribución (VAD) y los impuestos.
Los ajustes realizados por el Gobierno Nacional a principio de año tienen que ver con el primer punto mencionado (Costo de Abastecimiento y Transporte).
Ese ítem se refiere al precio que deben pagar las distribuidoras por la electricidad. Los ajustes realizados por el Gobierno de Mendoza se aplican sobre el segundo punto (Valor Agregado de Distribución).
Ese ítem representa el precio que las distribuidoras le cobran a los usuarios finales por llevar la electricidad a sus casas. Es decir, que el VAD representa la ganancia que tienen empresas como Edemsa y Edeste, por ejemplo.
En esta oportunidad, el aumento se aplicará sobre el Valor Agregado de Distribución. El incremento es el segundo y último determinado por el Decreto 1.163, que fue publicado el 12 de julio de 2017, tras realizarse una Audiencia Pública en la provincia.
El artículo 2° de dicho decreto dice textualmente: “Instrúyase al Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE) a establecer y poner en vigencia el Cuadro Tarifario de Valor Agregado de Distribución de Referencia a Usuario Final (Vadruf) según el esquema gradual de implementación que prevé la siguiente adecuación tarifaria: a partir de los consumos del 1º de julio de 2017 del nueve con ochenta por ciento (9,80%) sobre el Cuadro Tarifario a Usuario Final vigente al 30 de junio de 2017; a partir de los consumos del 1º de noviembre de 2017 del doce con cincuenta por ciento (12,50%) sobre el Cuadro Tarifario a Usuario Final vigente al 30 de octubre de 2017”.
Ya se había aplicado la suba del 9,80% en julio y ahora es el turno del otro 12,5%. Como fue explicado anteriormente, ese incremento se aplica solo sobre uno de los tres ítems que conforman la tarifa y su impacto en las facturas bimestrales varía de acuerdo a la categoría del usuario.
Sigue la tarifa social
Más allá de las modificaciones de los cuadros tarifarios, Elián Japaz se encargó de aclarar que “continúa vigente la Tarifa Social”, beneficio que le permite a los usuarios con menor ingreso pagar una tarifa más económica.
Los usuarios de la categoría T1-R1, por ejemplo, pagan el KWh a $ 0,9985, pero si reciben Tarifa Social abonan $ 0,2781.
Eso permite que sus facturas sean considerablemente más bajas que las de un usuario común. Los requisitos necesarios para acceder al beneficio se pueden conocer en la web www.epremendoza.gov.ar.
No obstante, los usuarios que no cumplen los requisitos de la Tarifa Social también pueden acceder a un precio diferencial si consiguen ahorrar lo suficiente.
“Sigue vigente el premio de una tarifa más baja para los usuarios que logran consumir al menos un 10% menos que en igual período del 2015”, indicó Japaz.
Siguiendo con el ejemplo de los usuarios T1-R1, el cuadro tarifario vigente cobra $ 0,9985 por KWh, pero si en un bimestre el usuario gasta entre 10% y 20% menos que en los mismos meses del período 2015, pagará $ 0,8182 y si ahorra más de un 20%, pagará $ 0,6387.
Vienen 9 meses sin retoques en el VAD
El incremento del 12,5% sobre el Valor Agregado de Distribución (VAD) fue el último del año y la nueva composición tarifaria no debería variar hasta agosto del 2018.
Elián Japaz, del EPRE, explicó que “en mayo del año próximo se hará una nueva audiencia pública en la que se calculará nuevamente cuánto se debe pagar por el VAD”.
El cuadro tarifario que resulte del debate público se aplicará recién en agosto del año que viene. “Hasta ese mes no habrá más cambios en la parte de la tarifa que depende de Mendoza”, indicó Japaz.
De todas formas, no se pueden descartar aumentos en la parte de la tarifa que depende del Gobierno Nacional (Costo de Abastecimiento y Transporte).
