El delantero Luis Suárez fue sancionado hoy con nueve partidos de suspensión para jugar para el seleccionado uruguayo y tampoco podrá actuar en su club, el Liverpool de Inglaterra, durante los próximos cuatro meses, al ser sancionado de oficio por la FIFA tras haber mordido a Giorgio Chiellini en el partido ante Italia, por la tercera fecha del Grupo D del Mundial de Brasil.
De ese modo, Suárez se perderá lo que resta del Mundial y Uruguay, que el sábado enfrentará a Colombia por los octavos de final, sufrirá una sensible baja.
La FIFA suspendió a Suárez por nueve partidos y para realizar cualquier actividad relacionada con el fútbol en los próximos cuatro meses, además de multarlo con 100.000 francos suizos, el equivalente a 82.200 euros.
El máximo organismo del fútbol mundial anunció que Suárez tampoco podrá entrar en los estadios en los que juegue Uruguay mientras esté cumpliendo con los nueve partidos de suspensión.
"No se puede tolerar este tipo de comportamiento en un terreno de juego, especialmente durante la Copa Mundial de la FIFA, cuando millones de personas tienen la vista puesta en los jugadores", dijo Claudio Sulser, presidente de la Comisión Disciplinaria de la FIFA.
Y agregó: "La Comisión Disciplinaria ha tenido en cuenta todos los elementos del caso y el grado de culpabilidad de Luis Suárez de acuerdo con lo estipulado en el Código Disciplinario. La decisión ha entrado en vigor en el momento en el que se ha comunicado".
Según la prensa española, Barcelona tenía todo acordado con el Liverpool para fichar al delantero, de modo que habrá que esperar si el club español decide formalizar la operación pese a la suspensión que la FIFA le aplicó al delantero.
Suárez mordió en la espalda a Chiellini el martes, a pocos minutos del final del partido en el que Uruguay se clasificó a los octavos de final tras superar 1-0 a Italia.
La Asociación Uruguaya de Fútbol había presentado el miércoles un descargo en defensa de Suárez, pero la FIFA igual le aplicó una fuerte sanción.