El Lyon dio vuelta el partido y terminó ganando 2-1 ante el Besiktas, en la ida de los cuartos de final de la Europa League, en un partido que estuvo marcado por distintos disturbios violentos, que incluso obligaron a retrasar 45 minutos la hora de inicio del duelo.
Pero antes del fútbol y los goles, la violencia se invitó una vez más a la fiesta para deslucir el espectáculo. El inicio del partido comenzó 30 minutos más tarde ya que antes del inicio del partido los disturbios hicieron que todo se modificara.
En lo estrictamente deportivo, los lioneses lograron levantar un partido que por momentos parecían tener perdido, gracias a los tantos en los últimos minutos de Corentin Tolisso (minuto 83) y Jeremy Morel (85). Antes había marcado para los turcos el holandés Ryan Babel (15).
"Hay que creer hasta el final y eso nos ha servido. Hemos confiado en nuestras cualidades, tuvimos muchas oportunidades", analizó Morel.
Los hinchas que invadieron el campo de juego procedían del fondo sur. Según un periodista de la AFP en el lugar, los aficionados querían protegerse de los objetos y petardos lanzados desde la parte superior de las tribunal. El presidente del Lyon, Jean-Michel Aulas, tomó el micrófono para dirigirse a los hinchas en el momento del caos, según las imágenes de televisión.
En los momentos previos al encuentro hubo incidentes en los alrededores del estadio, por un lado entre hinchas turcos y franceses, y por otro entre aficionados turcos y las fuerzas del orden. En esos últimos incidentes hubo un empleado del estadio herido. El partido tiene el nivel 4, el máximo, en la escala de valoración de riesgos en este tipo de eventos deportivos.