Pese a un informe que aconseja rescindir el contrato con la empresa proveedora búlgara Stroy Project Eood por graves fallas en la calidad de las bengalas y cartuchos de ioduro de plata utilizados para la lucha antigranizo activa durante la campaña 2013-2014, dicha firma seguirá vinculada a la provincia en esta temporada.
Así queda reflejado en una resolución que firma el ministro de Agroindustria, Marcelo Costa, adjudicándole a Stroy un contrato de más de $ 2,5 millones por 6 mil bengalas.
Previo a la decisión de Costa, la asesoría letrada de Agroindustria había evaluado fallas en el material pirotécnico adquirido por compra directa y licitación pública para la siembra de nubes en el ciclo anterior, verificadas tras series de ensayos de disparos.
Y a partir de un dictamen del Departamento de Aeronáutica que deja expuestos diversos problemas como encendido parcial y tiempo de quemado del ioduro inferior a 3 minutos en más de 7 mil proyectiles comprados por licitación del 24 de setiembre de 2013 al 5 de febrero de 2014.
Si bien, notificación mediante, el 12 de marzo pasado Stroy había reconocido el problema comprometiéndose a una reparación del material defectuoso y a una compensación con 500 bengalas nuevas antes del 31 de diciembre, otra prueba confirmó irregularidades. De 48 unidades testeadas al azar en una nueva partida, funcionó menos del 1%.
El informe concluye que debe procederse a “rescindir la adjudicación efectuada o de provisiones no cumplidas”, además de la anulación de la orden de compra respectiva. Es que de 12 mil unidades comprometidas, según la Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas (DACC), se recibieron sólo 7.200, sin contar otras 6 mil por compra directa, un recurso utilizado dos veces en 2013.
“Lo ideal sería disponer de una partida de prueba y hasta de una fábrica en el país, porque Mendoza es el único importador y usuario de este tipo de material y es imposible devolverlo.
Se hace un análisis de recepción pero lamentablemente no hay opciones; la pirotecnia llega y debe utilizarse en su totalidad, no hay material de más para probar y, por una cuestión presupuestaria, no se compra a cuenta. Se trata de un conjunto de factores que incluyen tiempos de licitación pero una partida deficiente no significa que el proveedor venda todo igual.
Aún así, monitoreamos las fallas en los vuelos”, argumentó el titular de la DACC, Marcos Scipioni.
Cuestión de números
Por recomendación de la asesoría de Agroindustria, la situación ameritó un apercibimiento a Stroy Project como proveedor del Estado, además de ejecutar la garantía por el 5% del monto facturado, unos $ 200 mil. Y una multa sin precisar, lo cual no excluye iniciarle acciones legales, potestad del gobernador Francisco Pérez.
Si bien el hecho llegó a la Fiscalía de Estado, para Agroindustria, pese a tratarse de “fallas graves”, no hay motivo suficiente para marginar a la firma búlgara de futuras licitaciones públicas. “Es la primera vez que la empresa registra un problema así pero dos apercibimientos constituyen un impedimento legal que la inhabilite”, aclaró Scipioni.
Así, en setiembre de 2014, el ministro Marcelo Costa firmó la compra directa a Stroy Project de otras 6.000 bengalas para el ciclo actual, por un total de U$S 303.000 ($ 2.505.507, al tipo de cambio de ese momento). Y define la licitación de 13 mil unidades, luego de que la estadounidense Ice Cristal, proveedora de cartuchos y principal rival, hubiera “observado” irregularidades de su competidor.
Otro factor para explicar porqué la Provincia volvió a favorecer a la firma está en la “diferencia abismal”, como lo definió el director de la DACC, entre cotizaciones. Mientras Stroy se mantuvo en unos U$S 50 por unidad, Ice ajustó 60% en dólares.
Antes, el dictamen de la Asesoría Letrada del Ministerio fue contundente respecto a la afectación de intereses del Estado en el último año debidos a estas falencias: “Una siembra deficiente en base al uso de productos pirotécnicos que no cumplen los requisitos de calidad previstos en el pliego de condiciones arroga mayores gastos a la Provincia que se ven agravados en una temporada en la que los accidentes climáticos afectaron severamente la economía provincial, con pérdidas de hasta 90% en productos de zonas afectadas”.
Además, el análisis describe un escenario con mayores erogaciones por “incremento del universo de productores susceptibles de beneficiarse con el Fondo Compensador Agrícola” así como pedidos de subsidios de los no beneficiarios.
Desde la DACC admiten que lo ocurrido duplicó el margen histórico de fallas en el material de siembra (del 10% al 20%). Pero que, si bien se incrementa la dotación en el mismo porcentaje para compensar, la urgencia de disponer de insumos es prioridad.
El presupuesto de la campaña 2014-15 de la lucha antigranizo ronda los $ 40 millones. Dentro de ese total, el componente importado del material de siembra se encareció, por la devaluación en un 30% hasta llegar a una pauta actual de gastos de $ 8 millones entre las bengalas de Stroy y los cartuchos de Ice Cristal.
El consumo de ioduro ya superó el promedio histórico
Más allá de las irregularidades detectadas en la última campaña, en lo que va del ciclo 2014-15 el uso de bengalas y cartuchos ha sido más elevado de lo habitual, según la DACC. En cifras concretas, al 30 de diciembre los aviones ya utilizaron 4.509 bengalas y 5.882 cartuchos, lo que no sólo implica un consumo 50% superior al período octubre-diciembre de 2013 sino que también deja atrás a la media histórica de la época: algo más de 4 mil bengalas y 1.781 cartuchos.
El dato difundido por el organismo va de la mano de una mayor cantidad de horas de vuelo de los aviones para sembrar nubes. Las 321 horas acumuladas hasta el martes 30 de diciembre representan casi un 10% más de tiempo en el aire que el año anterior.
Durante la campaña 2013-2014, la Provincia compró 22 mil bengalas a Stroy Project: 10 mil por compra directa y otras 12 mil por licitación. En cuanto a cartuchos, le adjudicó 7.000 a Ice Cristal, que durante el ciclo actual tendrá más trabajo por consejo del Comité Científico que evalúa la lucha antigranizo en Mendoza.
El Comité observó que una mayor dotación de cartuchos para inyectar en base y tope de nubes puede mejorar la eficacia de la lucha. De hecho, los tres aviones en actividad ya vuelan con hasta 205 unidades, el doble de la provisión.
Al respecto, el director de Contingencias Climáticas, Marcos Scipioni, destacó que “resulta mejor que con bengalas, utilizadas para una siembra preventiva”. Y que, en términos de eficiencia, la superficie promedio anual con daños por granizo se redujo de 15 mil a 12 mil gracias a la siembra de ioduro. “Significa $ 600 millones menos en pérdidas para la producción si se compara con un año sin lucha”, puntualizó el funcionario.