Fueron las vueltas del fútbol y de la vida las que lo hicieron protagonista exclusivo de un verdadero déjà vu. Apenas dos años después de haberse interrumpido su primer ciclo de la manera menos pensada, la instantánea se repite: el salto mirando hacia el cielo con los brazos en alto y el festejo interminable de otra clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores de América. Todo un guiño cómplice del destino.
-¿Por qué creés que volviste a Godoy Cruz?
-Creo que está ligado a lo que hicimos en la primera etapa y a la manera en la que lo hicimos. También creo que tuvimos resultados porque creo que hicimos el 68 por ciento (sic) de los puntos y logramos la clasificación a los octavos de final de la Libertadores. Pero creo que eso no es lo importante. El trabajo y la armonía que se vive hoy es la misma de aquella vez. Cada uno de los chicos que trabajan hoy en el club han aportado para que yo esté hoy acá otra vez porque formamos un lindo grupo y eso tiene un gran valor.
-Cuando llegaste la primera vez dijiste que la Libertadores no iba a ser prioridad. Sin embargo, clasificaron las dos veces a los octavos de final. ¿Seguís pensando lo mismo?
-Creo que sí, el torneo local es lo importante porque Godoy Cruz es un club que está en crecimiento y las prioridades de competencia son otras. Nosotros sabemos cuáles son los objetivos del club: crecer y seguir sosteniéndonos en ese nivel.
-Pero lo curioso es que nunca desdeñaste a la Copa. Siempre pusiste lo mejor...
-Intentamos poner lo mejor en cada partido. Entre suspensiones y lesiones, el equipo fue mutando sistemáticamente hasta que se encontró un equipo que se desarrolló en el segundo trimestre con nosotros y después lo hizo prácticamente durante dos años. El primero que salió fue Javier (Correa), después Gastón (Giménez), Juanfi (Garro), Pol (Fernández)... En ese momento jugábamos cada tres días y había que poner los mejores futbolistas en cancha.
-¿El hecho de tener un equipo tan joven y casi nuevo, tácitamente significa tener menos presión?
-No, yo creo que no.
-¿Por qué no? Es lo mismo si se hubiesen quedado Abecasis, Viera, Ángel González y Juan Martín Lucero...
-Creo que hoy Godoy Cruz está formando un equipo para los próximos dos años. El club tiene las condiciones necesarias y está en el momento indicado para pensar en dos años, pero esto no quita que no tengamos que ganar. Son dos cosas distintas. ¿Por qué pienso de esa manera? Porque Burgoa, Manzur o Aleo, por ejemplo, van a tener tres o cuatro torneos más encima y porque los chicos que llegaron, que también son jóvenes, van a tener otro progreso.
-Mencionás mucho a Burgoa- ¿Es tu debilidad?
-Lo menciono porque me parece que es un futbolista muy interesante y todavía es muy joven. Entonces, le podés pedir más porque aún está en desarrollo y va a seguir creciendo.
-El presidente dijo que lo único que le falta es ponerle una estrella al escudo. ¿Pensás de la misma manera?
-Godoy Cruz está en crecimiento. Ojalá podamos ser parte de ese proceso y de ese camino que se han trazado los dirigentes como José que llevan mucho tiempo en el club.
-¿Qué buscás que el equipo muestre a corto plazo?
-Quiero encontrar el equipo, que sea equilibrado.
-En tu paso anterior por el club dijiste que este era un lugar para no irse nunca. Te tocó irte y volver. ¿Seguís sosteniendo lo mismo?
-Es un lugar para desarrollarte y que tiene un montón de condiciones para trabajar hoy y sobre todo, para el futuro.
-¿Y qué posee Godoy Cruz que no tienen los otros clubes en los que te tocó estar?
-(Se hace un largo silencio, piensa) Es difícil... No sabría decirte con una sola respuesta qué cosas tiene de diferente. Sí sé que acá estamos muy cómodos, que estamos muy a gusto y eso te da la sensación de que es un lugar para quedarte y para desarrollarte porque este es un club que va hacia arriba y donde hay un montón de cosas para poder crecer. Es algo que motiva y lleva tiempo. Crecés con el tiempo, no de un día para el otro. Y el tiempo que tiene Godoy Cruz es muy bueno.
El desafío de formar un equipo nuevo
Que Godoy Cruz ha perdido piezas fundamentales de su estructura es una realidad. Empezando de atrás para adelante, del equipo titular que comenzó jugando el semestre pasado, ya no están Fabrizio Angileri, Diego Viera, Luciano Abecasis, Juan Martín Lucero y Ángel González. Y el propio Bernardi es consciente de ello. “Godoy Cruz está en un cambio, ha perdido la defensa entera, más allá que Cardona se sigue sosteniendo dentro del equipo. Lo de Ángel González era algo que estaba previsto y no es algo que nos tomó por sorpresa. La dificultad es propia de cuando se termina un proceso y comienza uno nuevo. Igual, hay muchos chicos que ya han jugado en Primera y están Cardona, el Morro, Ramírez, Andrada y Henriquez, que ya tienen un recorrido. Hay que rodearlos con los jugadores jóvenes que hay llegado para formar un equipo nuevo. Ojalá podamos lograrlo lo más rápido posible”, anhela.