Antes del partido, Lucas Bernardi se dio un abrazo fraternal con Hernán Jorge Crespo (se conocen de sus tiempos en Europa). Durante el encuentro, observó cómo su equipo fue superado nítidamente por un adversario que hace un culto del buen trato de pelota y que físicamente “voló” sobre el verde césped del Florencio Sola. Y al final, en la zona mixta de atención a la prensa, no le quedó otra que rendirse ante la evidencia: Godoy Cruz se llevó para Mendoza un punto que no mereció. Pero el fútbol es así, por eso es tan inmensamente maravilloso.
“Creo que hoy, si hablamos de merecimientos para ganar, era el que menos merecíamos porque nos enfrentamos a un rival de verdad”, comenzó analizando. Y continuó argumentando el planteo mezquino de su equipo: “La idea del partido era sostener el ritmo de un rival que juega muy bien, un equipo muy bien entrenado en todos los aspectos y el mejor adversario que hemos enfrentado desde que yo estoy en Godoy Cruz. Sabíamos que para sostener el ritmo debíamos ceder algunas cosas, como la tenencia de la pelota. Es cierto que se pone en riesgo un montón de cosas, pero cediendo la pelota generábamos espacios para nosotros”.
-Al menos desde la propuesta y la dinámica de juego, ¿creés que Universidad de Concepción es un rival similar a Banfield?
-La propuesta es bastante similar, pero la verdad es que sinceramente no pude mirar lejos porque íbamos a enfrentar a un rival muy bueno como es Banfield y no estoy pensando que este rival se va a parecer a otro. Estoy enfocado en esto, en que de acá tenemos que recuperar puntos y también en la Copa Argentina.
-¿El sábado contra Armenio vas a poner lo mejor?
-La Copa Argentina para nosotros es muy importante, no sólo por lo económico sino por el prestigio que otorga y porque el premio es nada menos que la clasificación a la Libertadores. La Copa de la Superliga también va a generar un espacio más. Lamentablemente los empates que hemos tenido nos alejan un poco de la clasificación a la Sudamericana del año próximo, pero no ha sido el mejor comienzo del semestre y, dentro eso, lo que valoramos es el esfuerzo que los chicos llevan adelante porque, gracias a Dios, somos realistas: conocemos claramente cuáles son nuestras debilidades y le damos para adelante para corregirlas.
-¿Lo empataron con más corazón que fútbol?
-Sí, claramente. Porque estamos jugando un fútbol con intenciones para sostener el ritmo de un partido durante 95 minutos, no estamos jugando un partido de 95 minutos. Entonces, en esa dinámica perdés y ganás cosas y estamos en ese camino para poder estirar los partidos y llegar al final del encuentro con aire para poder doblegar al rival.
-¿Cómo se hace para afrontar de la mejor manera la seguidilla de partidos que se viene, que es peor aún a la que pasó?
-Entrenar, entrenar, entrenar sin desgastar. Ni mucho ni poco, que el jugador esté siempre entrenándose.
-En estos últimos dos partidos al menos apareció el gol…
-Sí, apareció el gol y eso es importante. Además, aparecieron jugadas de gol.
Cumbre de entrenadores
Lucas Bernardi no regresó con la delegación tombina a Mendoza ayer por la mañana. El rosarino debió viajar a Paraguay y por estas horas se encuentra en la imponente sede de la Conmebol en Asunción. ¿Por qué? Fue invitado en el marco del primer Congreso de Técnicos de la Conmebol, organizada por el ente madre del fútbol sudamericano que participen los técnicos de los clubes que juegan la actual Copa Libertadores. El objetivo es dialogar sobre diversos temas vinculados al juego y a cuestiones organizativas. Del mismo participan Gustavo Alfaro, Marcelo Gallardo, Daniel Garnero, Martín Pautasso, Diego Cocca y Claudio Vivas, entre otros.
