Campeón del mundo individual los tres últimos años y desde 2014 en la modalidad de parejas con Rebecca Tarlezzi, Luca Lucaroni es sin duda alguna una de las estrellas más rutilantes de la disciplina de Artístico que participará en los World Roller Games 2019. El patinador italiano afronta la cita de Barcelona con tranquilidad, confiado en sus posibilidades, aun sabiendo que será el rival a batir y que tendrá que emplearse a fondo para agrandar un palmarés que le sitúa en el top mundial.
“Sé que será muy difícil volver a ganar el Campeonato del Mundo, tanto individual como por parejas, pero estoy preparado para luchar al máximo y conseguirlo. Vengo con buenas sensaciones y espero volver a triunfar”, afirma el patinador italiano durante las horas previas a su debut en Barcelona.
Lucaroni asegura que actuar en el Palau Sant Jordi supone un estímulo para él por la majestuosidad del recinto y el calor que transmiten los aficionados españoles. “Nunca he actuado en Barcelona, pero ésta es una de mis ciudades preferidas. En cambio, sí que lo he hecho en Reus, en el Mundial de 2014 cuando aún era junior, y guardo muy buenos recuerdos por el cariño de la afición. Este pabellón es impresionante y seguro que se va a llenar. Actuar ante tanto público será una motivación extra para hacerlo lo mejor posible”.
Relajado y accesible, Lucaroni cuenta que la clave para mantenerse tanto tiempo en la élite del patinaje es cuestión de perseverancia. “El patinaje requiere mucho sacrificio y mucha pasión. Hay que trabajar mucho y dedicarle muchas horas, pero sobre todo hay que divertirse. Si uno no se divierte patinando, nunca llegará a lo más alto y yo me divierto mucho patinando”, sostiene el de Perugia.
A sus 24 años, Lucaroni se ha convertido en un patinador prácticamente imbatible en categoría individual y mucho más que esto formando pareja con su insustituible compañera Rebecca Tarlazzi, de 20. En el Mundial de Reus de 2014 iniciaron su reinado en la modalidad de parejas. “El secreto es la compenetración. Somos como hermanos y nunca discutimos. Y cuando uno de los dos está en horas bajas, el otro le anima”. Cada día se entrenan entre seis y siete horas, la mitad del tiempo solos y el resto juntos. Curiosamente, dicen que fuera de la pista se llevan de maravilla con Alice Esposito y Federico Rossi, sus eternos rivales en la lucha por el oro, y que también estarán en el Palau Sant Jordi.
Una pugna que Luca Lucaroni no tiene intención de romper ni que sea para probar suerte en el patinaje sobre hielo y tener posibilidades de luchar por una medalla olímpica. “Alguna vez lo he pensado, pero ahora ya no es posible. Es demasiado tarde para mí”, zanja el italiano.