Un sector que manifestó estar muy afectado por las restricciones que implica la cuarentena y aún con la posible proyección luego de que sea levantada, es el de los encargados de organizar eventos sociales.
Es que, por ahora, tanto fiestas de egresados, cumpleaños de 15 y casamientos -tres de los festejos más realizados-, se han tenido que suspender sin fecha cierta de reprogramación.
Así lo contó Fabián Manzur, presidente de la Asociación de propietarios de salones de fiestas de Mendoza. "Nuestro sector será uno de los últimos en empezar a funcionar. En primer lugar, por la situación económica que ha golpeado al país y estos son gastos onerosos, ya es una dificultad. En segundo lugar, la gente seguro queda con algún miedo e igual no quiere realizar el evento por más que se pueda. Y tercero, los eventos ya contratados no podemos reprogramarlos para ningún tipo de fecha porque no sabemos cuándo se va a terminar la pandemia", enumeró Manzur.
Familias afectadas y difícil proyección
Dentro de la información que aportó Manzur, el dato más alarmante es que al frenarse la actividad del mencionado sector son muchas las familias que se quedan sin trabajo. "De nuestra asociación, viven 500 familias directamente y 2.500 cuando todo funciona, por los proveedores, mozos (que la mayoría son estudiantes que aprovechan para sostener sus estudios), Dj´s, etc. Hoy todas esas familias están desamparadas, es nuestra cruel realidad", remarcó el titular de propietarios de salones de fiestas.
En el mismo sentido, Manzur también evaluó que para ellos es muy difícil tener una certeza de cuándo volverán a trabajar. Es que, de los integrantes de la asociación que presiden, sólo el 10% son propietarios y el 90% restante, inquilinos.
"Son alquileres muy elevados porque es para hacer funcionar una empresa. Lamentablemente, hay muchos que no se si podrán reabrir sus puertas", evaluó el empresario mendocino.