Los salarios privados perdieron 8,8% de poder de compra durante 2018 en Mendoza

La caída fue una constante en todo el año y se profundizó tras la devaluación de mayo.

Los salarios privados perdieron 8,8% de poder de compra durante 2018 en Mendoza
Los salarios privados perdieron 8,8% de poder de compra durante 2018 en Mendoza

Los asalariados del sector privado registrado de Mendoza perdieron 8,8% de poder adquisitivo durante 2018. El dato se desprende de un informe publicado por el Ministerio de Trabajo de la Nación, que muestra la situación particular de cada rama de actividad de la provincia.

De acuerdo al estudio, ninguno de los 13 rubros analizados logró ganarle a la inflación.

Algunos perdieron menos y otros más, pero todo quedaron por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC). 

La caída general

Para calcular la variación del salario real, se tuvo en cuenta el sueldo promedio bruto (antes de restar aportes y contribuciones patronales) de Mendoza durante los doce meses de 2017($ 20.951,45) y se lo comparó con el sueldo promedio de 2018 ($ 26.335,29).

Si bien la diferencia entre uno y otro muestra un crecimiento nominal del 26%, cuando se toma en cuenta el efecto de la inflación se obtiene un resultado completamente diferente.

Según la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza, la inflación acumulada de la provincia entre 2017 y 2018 fue de 37,8%. Eso quiere decir que cada peso que cobraron los mendocinos el año pasado, tuvo un poder de compra 37,8% menor al que tenía un año atrás.

Entonces, si se compara la variación salarial (26%) con la inflación acumulada (37,8%) se deduce que los sueldos del sector privado registrado de Mendoza perdieron 8,8% de poder adquisitivo durante el el año pasado. 

Perdiendo la carrera

El balance completo del 2018 muestra con claridad que los sueldos perdieron contra la suba de precios, pero un análisis de lo que ocurrió mes a mes permite ver como la situación se fue agravando con el correr del tiempo.

En enero, por ejemplo, el salario bruto de los trabajadores del sector privado pasó de $ 18.155 en 2017 a $ 22.466 en 2018 (24% de variación de punta a punta). La inflación interanual de ese mes fue de 27,8%, de donde se deduce que, de enero a enero, los salarios perdieron 3,2% de poder de compra.

En los meses siguientes las variaciones fueron similares y en algunos casos la pérdida contra el IPC fue menor, pero a partir de junio la inflación se disparó y los sueldos no pudieron seguirle el ritmo.

Eso hizo que la comparación directa interanual de cada mes llegara a mostrar pérdidas de hasta 15,4%.

Consecuencias de la crisis

El economista Pablo Salvador, explicó por qué los salarios perdieron tanto contra la inflación. "El aumento del IPC fue tan grande tras la devaluación de mayo, que los salarios quedaron rezagados. Eso provocó una caída del consumo y en consecuencia, menor actividad económica y menor generación de empleo. Esto último impidió que las paritarias fueran mejores y los sueldos no pudieran recuperar el terreno perdido", comentó.

La economista Amalia Granata coincidió en que el punto de quiebre fue la devaluación de mayo de 2018, pero opinó que el problema no fue la suba del dólar en sí, "sino las políticas del Gobierno Nacional que condujeron a la devaluación".

Puntualmente se refirió a "la deuda de las Lebacs, que se hizo impagable y provocó la disparada del dólar".

Por su parte, Sebastián Laza, economista asesor del Ministerio de Economía de Mendoza, reconoció que "en los últimos meses de 2018 se notó la pérdida del poder adquisitivo de lo salarios", pero destacó que la provincia pudo mantener su nivel de empleo.

"El Gobierno Provincial no puede hacer demasiado por los salarios privados, porque responde a cuestiones macroeconómicas, pero sí ha podido generar políticas de sostenimiento de empleo", apuntó.

Todas las actividades terminaron “en rojo”

Tomando como referencia la inflación acumulada de 2018 y el salario promedio bruto de cada sector, se observa que la actividad económica que más poder adquisitivo perdió durante el año pasado fue la construcción, con una pérdida de poder de compra del 13,1%.

Apenas por debajo aparecen la enseñanza (-11,3%), agricultura y ganadería (-10,7%) y servicios inmobiliarios (-9,6%).

Más allá de la comparación con la inflación, el sector mejor pago es la minería, con un salario bruto de $ 90.485. En el otro extremo está la agricultura ($ 13.991) y algo por encima están los rubros de enseñanza ($ 16.015) y "hoteles y restaurantes" ($ 18.961).

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