Arrancaba la serie final del Clausura y los hinchas del "Sanjo" con un almanaque en la mano y una lapicera tachaban los días. Es que su máximo ídolo, Lucas Rubia, tenía previsto un viaje al exterior desde hace un largo y tiempo y como el certamen se demoró un mes más de lo estipulado, no podía estar.
Una baja importante. Sin embargo, sus compañeros le prometieron que le aseguraban una tercera final y así fue nomás. No bien bajó del avión el último lunes y con la serie 1 a 1 se puso a disposición del cuerpo técnico. Y uno de los jugadores que más lo contuvo ¿quién fue?: su hermano mayo, Facundo. El "Garza".
Ambos fueron rebeldes, pícaros desde adolescentes. Juntos y adentro del rectángulo de juego sin tener más de 17 años, le arrebataron la final a Regatas del Clausura 2001 en Talleres.
Fue un hecho histórico y más si se tiene en cuenta que en la final del año, Regatas no se presentó porque fue programada para los primeros días de enero. A partir de ese momento, comenzaron a cortar y coleccionar "redes". Una sana costumbre que se sigue alimentando.
A principios del 2012, la Unión Deportiva San José rompió el mercado de pases y contrató al "Mula" Rubia para jugar la A2. Situación que no creían ni propios ni extraños. Así, Lucas comenzó a jugar en el ascenso local y en cada partido demostró la misma pasión, la misma jerarquía, la misma fuerza que cuando jugaba instancias finales para llegar al TNA. Así es su ADN. Entra a la cancha, disfruta y hace disfrutar al espectador. Se divierte y roba aplausos y admiración por doquier.
En una recordada serie final, el "Sanjo" le ganó la pulseada al poderoso Capital de Berman, Zogbe, Fernández, Delmonte, entre otros. A partir de ese momento, el "Mula" se convirtió en ídolo y héroe de cientos de chicos que día a día se sumaban a los entrenamientos de las formativas en San José. Y no faltó mucho tiempo para que su hermano, el "Garza", también dejara su casa y se reencontrara con su hermano en el mismo camarín y con la misma camiseta.
Por su estilo, liderazgo, jerarquía, Facundo es un líder natural. Contagia optimismo y le gustan los desafíos. San José fue de menor a mayor y después de tres años consecutivos de participar en la máxima categoría, logró el sueño que se trazó su presidente Mario Díaz a fines del 2010. San José Campeón en la máxima división de Mendoza y mucho tuvieron que ver los hermanos Rubia.
Por esta razón y en medio de los festejos entre cientos de hinchas que invadieron el campo de juego, ambos y casi a coro, charlaron con Más Deportes .
-¿Están festejando como si fuera el primer título que ganan en su carrera deportiva?
-Facundo: "La verdad siento una alegría enorme. Nos preparamos con el Valentín (Puebla), con los chicos todos estos meses para llegar lo más arriba posible. El año pasado estuvimos entre los cuatro mejores. Este año apuntamos a llegar a una final. Salimos primero, obtuvimos la ventaja de localía. Después, después pasaron las cosas que pasaron en el medio. Y bueno, nos pudimos llevar el campeonato. Estoy feliz realmente. Mirá como la gente festeja.
-Lucas: A lo largo del campeonato demostramos que fuimos de menor a mayor. Maduramos como equipo y lo pudimos demostrar. Realmente estoy feliz por la felicidad de un club de barrio. San José es muy importante para mi.
-¿Jugaron con la misma intensidad que cuando debutaron en Primera. A qué se debe ese fuego sagrado que mantienen?
-Facundo: "Estemos en el equipo que estemos, tratamos de dejar lo mejor por el club. Y la gente de San José se ha portado de manera excelente con nosotros. Nos ha mostrado un amor incondicional y bueno, obviamente, este título es para todos ellos; porque siempre nos apoyaron en las buenas y en las malas".
-Lucas: "La gente del Sanjo me quiere. Es hermoso ese. Desde que llegué siempre me ha tratado muy bien. Estoy muy agradecidos a ellos y por eso, uno cuando entra a la cancha quiere dejar la vida".
-En este juego decisivo, se encontraron en varias ocasiones en ofensiva, pero sorprendió que no se reprocharan nada entre ustedes. ¿Qué pasó hicieron una promesa?
-Facundo (risas): "Es verdad, estuvimos muy tranquilos. Es que el Mula es un caradura, se fue 10 días de vacaciones y se lo nota fuera de estado. Entonces, no le quedaba aire (más risas)".
-Lucas: "Vos sos un caradura (risas), llegué y te hice dar la vuelta olímpica. En serio, llegué y sos campeón"
-Mula, lo tuyo es increíble, te vas en plena definición del Apertura A1 y del Regional de Clubes y la gente no te reprocha nada, es más, aumenta la admiración y te ovacionan a cada paso.
-Lucas: "Hice lo imposible para cambiar las vacaciones. Los chicos hicieron un esfuerzo gigante, se comprometieron y pudieron llegar a la final. Gracias a Dios hubo tercer partido y yo pude jugar. Fuimos campeones y damos la vuelta con toda esta gente que es incondicional.
-Y ahora, van por el Regional de Clubes. Sería un semestre inolvidable.
-Lucas: "Lo dijo mi hermano, nos preparamos para esto. Queremos ganar todo y seguir construyendo esto hermoso que se ha generado en el club.
-Facundo: "Queremos el título del Regional de Clubes. Es el otro objetivo planteado. Pero, sin dudas, que el torneo local tiene un sabor especial. Estamos felices, más allá de todas las desprolijidades que hubo en el medio. Este título es para toda esa gente que hizo lo imposible para que nosotros no saliéramos campeones.
-Mula, jugar con tu hermano es especial no? Te lo trajiste a San José y hoy pueden dar la segunda vuelta olímpica juntos? (la primera fue el Regional de Clubes 2014).
-Lucas: "Jugar con el Garza es muy emocionante. Salir campeón con mi hermano es algo único. Yo he jugado toda la vida con él. El primer año que estuvimos separados fue muy duro. Pero, gracias a Dios, me abrieron los brazos en este club y sinceramente no lo esperaba. Además, tenemos un plus, mi familia siempre está presente. Nos apoyan de manera increíble y eso te otorga otro plus. No le podés fallar en ningún momento.
Por último, como lo pueden definir a Valentín Puebla, hoy, entrenador de ustedes pero que es un amigo incondicional las 24 horas del día:
-Lucas: "Como humano es excelente. En lo deportivo está trabajando. Es muy nuevo. Lucha por trabajar, por aprender, por el grupo, porque estemos unidos. Desde el primer momento nos dijo que juntos íbamos a conseguir cosas. Con las individualidades excelentes que tenemos, el título se ganó en equipo.
-Facundo: "No hay más nada que agregar, él es pieza clave en este logro. Y se merece esta alegría. Juntos trabajamos para lograr estos resultados".
Y comenzaron a saltar nuevamente, recibieron la Copa, dieron una, dos, tres, cuatro vueltas olímpicas, fotos, autógrafos, y de nuevo enfrentaron los micrófonos y a coro le dedicaron el triunfo a su compañero y amigo Leandro Masieri, quien sufrió el fallecimiento de su mamá y no pudo jugar la final:
"Esto es para Leandro. Por su experiencia, forma de ser, amistad y jerarquía, es fundamental en el grupo. El más que nadie hoy necesita sentirse campeón.
