Una nueva jornada de descanso disfrutó el seleccionado argentino de rugby, y bien merecido lo tienen los jugadores después de hacer un gran esfuerzo al jugar dos partidos durísimos ante Nueva Zelanda y Georgia.
Por segunda vez el equipo cambió la concentración y esta vez se alojó en St. George's Park, cercano a la ciudad de Burton ya unos 70 kilómetros de la cancha del Leicester City, donde en una semana enfrentará a Tonga en su tercera presentación en la Copa del Mundo.
Todavía hay ecos del espectacular triunfo sobre Georgia, pero de a poco los jugadores, que ayer disfrutaron de tiempo con sus familiares y amigos que vinieron a alentarlos, comienzan a imaginar el encuentro contra el seleccionado del pacífico sur, que tendrá chances de clasificarse si es que derrota a Los Pumas.
“El cuerpo técnico está muy contento con lo que viene haciendo el equipo hasta ahora. Pero, yo sigo sosteniendo que el partido ante Tonga del próximo domingo es el más importante de esta fase. No hay que relajarse, más allá de que estemos felices por la forma en que le ganamos a Georgia”, contó Daniel Hourcade, entrenador del seleccionado argentino.
“Estamos con muchas ganas de que llegue el próximo domingo. Tonga va a ser otro rival duro, un nuevo desafío para darnos cuenta dónde estamos parados. Vamos a llegar más descansados, física y mentalmente, y creo que eso nos va a ayudar”, confió Tuculet
“Vivimos un par de días de mucha tensión, porque si perdíamos con Georgia quedábamos afuera del Mundial. Ahora estamos más tranquilos y estos días nos sirvieron para reacondicionarnos físicamente”, señaló el tucumano Nicolás Sánchez, el goleador del equipo.
“El del viernes fue un buen triunfo por la forma en la que se logró. No había sido una semana fácil y supimos estar a la altura de las circunstancias. Creo que un triunfo así y estos días de descanso nos vienen muy bien para llegar de la mejor manera al partido con Tonga, que va a ser tan duro como el que pasó", opinó Cubelli.
