El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, cayó ayer ante Escocia (21-19) en un partido discreto técnicamente, pero muy emotivo, que los argentinos parecían tener en sus manos, pero se les escapó a un minuto del final.
El conjunto que orienta Daniel Hourcade mejoró con respecto a la serie ante Irlanda, pero no supo cerrar el encuentro luego de haber tomado una diferencia de 9 puntos al promediar la parte complementaria. Por su parte, Escocia repuntó en el cierre y terminó dando vuelta la historia con un penal de Duncan Weir cuando restaba un minuto de juego.
Sobre el final el tucumano Nicolás Sánchez ensayó un drop, pero su disparo de sobrepique se fue desviado y con el murieron las ilusiones del elenco albiceleste.
De esta manera, Los Pumas terminaron la ventana internacional de junio con tres caídas: 29-17 y 23-17 ante Irlanda, y la última ante Escocia. El próximo paso será el Rugby Championship, que dará comienzo en agosto.
Para ese certamen, Hourcade dará a conocer -en los próximos días- la lista definitiva del plantel que viajará a Estados Unidos a realizar la pretemporada y empezará a prepararse para el debut en Pretoria (Sudáfrica), el 16 de agosto ante los Springboks.
Un inicio opaco
Opaca e imprecisa resultó la primera mitad, sin embargo Los Pumas se retiraron en ventaja por 8-7. El conjunto albiceleste, que ingresó al campo con nueve variantes con respecto al último test match ante Irlanda, arrancó mal, perdiendo en el scrum y luchando mucho para conservar las pelotas aseguradas en la segunda posición de la hilera.
Para colmos, sobre los 6 minutos, un grosero error del árbitro John Lacey (Irlanda) les permitió a los visitantes sacar ventaja. Tommy Seymour escapó por el flanco izquierdo y cuando era detenido habilitó adentro a Stuart Hogg, quien se lanzó al ingoal con Tomás Cubelli encima y cuando se aprestaba a apoyar perdió el control de la ovalada. El irlandés no vio la infracción y no pidió video ref, convalidando un try viciado de nulidad.
En desventaja, Los Pumas comenzaron a mejorar ante un equipo escocés muy rústico. Como en los partidos ante los irlandeses, defendieron bien y sacaron provecho de las pelotas recuperadas para atacar. Pero esta vez fueron mejorando en las formaciones fijas y poco a poco pasaron a controlar el juego.
Ese dominio se empezó a ver en el marcador cuando Javier Ortega Desio culminó una jugada de varias fases en la bandera izquierda. Y se acentuó en el resultado cuando Nicolás Sánchez capitalizó el primero de los dos drops que intentó en el segmento.
Escocia, que había estado cerca de vulnerar otra vez el ingoal argentino por intermedio de sus forwards, mejoró algo en el cierre de la etapa y pudo dar vuelta la historia, pero sobre la hora Douglas Weis falló un penal desde una posición incómoda.
Los Pumas arrancaron bien el segundo tiempo y estiraron ventajas con un penal de Sánchez a los 2 minutos de juego.
El encuentro seguía siendo trabado, pero los argentinos no tenían inconvenientes para detener al tosco equipo escocés, que tampoco tenía tanto la pelota.
Weir y Sánchez intercambiaron penales y la diferencia siguió siendo de cuatro hasta que, a los 20 minutos, Joaquín Tuculet, que había ingresado dos minutos antes, le puso el moño a la mejor jugada argentina del encuentro y dejó el partido 19-10. Parecía cosa juzgada.
Pero Escocia reaccionó y Los Pumas se quedaron. Achicaron los británicos con un penal de Weir, acortaron más con un try de Henry Pyrgos, tras un error defensivo albiceleste, pero aún así no le alcanzaba porque Weir falló la conversión desde posición favorable.
Pero el apertura estuvo más certero cuando Los Pumas cometieron su enésimo penal y a un minuto del cierre puso a su equipo en camino al tercer triunfo de la gira, un destino que en la última jugada no pudo cambiar “Nico” Sánchez al desviar su intento de drop.
Fue derrota, pero el balance de la ventana no es tan malo considerando que se utilizó a muchos jugadores con poca experiencia internacional y varios de ellos respondieron positivamente. Claro que esa falta de roce les jugó en contra, al menos en la tarde de ayer, cuando dejaron pasar una inmejorable chance de cerrar con una sonrisa.
La selección sub 20 terminó novena
La selección de Argentina Sub-20 de rugby se impuso por 41-21 a su similar de Escocia en partido de reclasificación, ayer en North Harbour, y terminó en noveno lugar del Mundial juvenil de Nueva Zelanda que consagró como campeón a Inglaterra.
Tras una primera fase decepcionante con tres derrotas en igual cantidad de encuentros, los Pumitas levantaron el nivel y la moral en la fase de reclasificación y acabaron con un digno noveno puesto, después de derrotar a Fiyi por 38-12 en las semis por ese sitio y luego a Escocia ayer para confirmar ese lugar.
