El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, derrotó a Irlanda en Cardiff, por los cuartos de final de la octava Copa del Mundo de rugby, por 43 a 20.
Cumplido el primer objetivo, que era superar la fase inicial, el equipo de Daniel Hourcade logró meterse en las semifinales del certamen, como lo hizo en el 2007, con una camada excepcional de jugadores liderada por Agustín Pichot.
Hoy, con un plantel mucho más inexperto, pero de gran jerarquía, el conjunto albiceleste dio otro golpe y quedó entre los mejores cuatro del mundo, ante un adversario que hasta hoy ocupaba el tercer lugar en el ranking ecuménico.
Irlanda llegó a estos cuartos de final con un karma: nunca pudo pasar esta instancia en un Mundial. Y esta no fue la excepción, en tanto que la Argentina dio un zarpazo de "puma" excepcional.
Los Pumas comenzaron de inmediato convencidos en lograr lo histórico. Matías Moroni marcó el primer try para los albiceleste a poco de los 2 minutos del primer tiempo, y luego, redondeó a 7, con la conversión de Sánchez.
Esto fortaleció la confianza a un equipo albiceleste que demostró una vez más que quiere romper pronósticos. En su mejor versión de juego Los Pumas superaron a uno de los favoritos.
A los 9 minutos, desequilibró Cordero que con puntapié habilitó al goleador argentino Juan Inhoff para que marcara un nuevo try para los Pumas y ampliar la ventaja (14-0). No obstante, a los 17', Nico Sánchez aseguró un penal para el 17 a 0 arriba.
Pero luego llegó el descuento de Irlanda a través del penal convertido por Ian Madigan (17-3). Y de inmediato, el penal de Nico Sánchez (20-3)
Argentina comenzó a desesperarse y dejó espacios para la libre acción de los irlandeses. A los 25 minutos, Irlanda se puso 20-10 después del try de los irlandeses de Luke Fitzgerald y la siguiente conversión de Madigan.
En el complemento, Irlanda entró con todo. Un error individual en la tercera línea le permitió a los europeos ponerse a 3 de Argentina (20-17).
Pero Argentina no abandonó la lucha. Sufrió pero intentó recuperar la efectividad en la defensa. Y a los 10' del complemento, llegó un penal a favor para que Sánchez sumara (23-17).
Falta de Herrera, la segunda (en la anterior obtuvo tarjeta amarilla), en un scrum, el cual posibilitó a Irlanda de descontar con un penal bien ejecutado de Madigan (23-20).
Pocos minutos después, y tras un penal errado de Irlanda, y uno acertado de Argentina, Los Pumas aumentaron nuevamente 26 a 20 y no se dejó avasallar más.
Hubo cambios, variantes, que nunca afectó el deseo de ganar, de saciar ese hambre de triunfo que empujó al elenco argentino para continuar presionando sobre el final.
A 12 minutos del desenlace, con la importancia de cuidar cada pelota y avanzar cada metro, Argentina ganó posición. Así llegó al try de Joaquín Tuculet, quien apoyó la quinda para darle paso a la conversión de Sánchez el 33-20.
Este fue el quiebre para que Argentina volviera a tener el control. Juan Imhoff se sacó hombre de encima y corrió hasta la línea de try. Un festejo adelantado por el 40 a 20. Porque a 4', una falta de Irlanda y penal para que Sanchez, liquidó el 43-20 final.
Argentina hizo historia. Ganó y por segunda vez en su historia llegó a una semifinal de un Mundial de Rugby, en donde deberá enfrentar al ganador del partido entre Australia- Escocia.
El dato: No menos importante es que Nicolás Sánchez, declarado mejor jugador del partido, que estuvo casi infalible, con cuatro conversiones y cinco penales, se colocó líder en la clasificación de goleadores del Mundial (74 puntos), Imhoff alargó a siete su récord de tries de un jugador argentino en la historia del torneo, cuatro en la presente edición.
Mirá el festejo argentino.
Acá los tryes de Los Pumas
El emocionante momento del himno