Los Olmos: barriecito de los ‘70, levantado por los vecinos

Se encuentra frente a los juzgados viales y el parque San Vicente y termina junto al Corredor del Oeste. En el inicio fueron 80 lotes. Los árboles de la antigua finca Tosi Tonelli, le dieron el nombre.

Los Olmos: barriecito de los ‘70, levantado por los vecinos
Los Olmos: barriecito de los ‘70, levantado por los vecinos

Muchos lo confunden con el barrio Matadero o con la extensión de algunos de los conglomerados que existen en la vecindad, pero Los Olmos es una pequeña estructura habitada con identidad propia, en el distrito El Trapiche, en el linde con Villa Marini (Godoy Cruz).
Los antiguos moradores hacen referencia a su hábitat contando que se trata de 80 lotes, en los cuales ellos levantaron sus casas a comienzos de la década del '70.

Pero, no se trata de 80 viviendas exactamente porque muchos de los habitantes levantaron otra casita más dentro del predio o un departamento, generalmente para alojar a algún hijo sin techo propio.

La vecindad es muy importante porque al este se encuentran los Juzgados Viales de la Municipalidad de Godoy Cruz y el amplio predio que conforma el parque San Vicente, un espacio verde que viene mejorando y que está siendo remodelado.

En cambio, hacia el oeste, el conglomerado habitacional 'topa' con los murallones del Corredor del Oeste Juan Domingo Perón. Más hacia la montaña, se ubica el barrio El Cardenal.

Todos los entrevistados, mayores de 55 años, coincidieron en que antiguamente el lugar era la gran finca de la familia Tosi Tonelli, una generosa superficie plantada  con uva y donde también había cerezas de buen tamaño. Y más allá, campo y serranía. Por supuesto no había noticias del corredor asfaltado que une Luján de Cuyo con la ciudad de Mendoza.

La cercana calle Salvador Civit, una vía de comunicación muy gravitante de este a oeste y viceversa, era por entonces un callejón lleno de cañas.

"A puro esfuerzo"

El metalúrgico Rodolfo Picco (71) tiene su hogar bien terminado, sobre calle Chile, que comunica Joaquín V. González con Boulogne Sur Mer, desde donde se puede empalmar con el corredor.

En el frente de la vivienda hay un cantero de rosas rojas y amarillas, que, cosa curiosa, están florecidas y subsisten sin arrebatos, salvo alguna travesura infantil.

Rodolfo construyó su domicilio "a puro esfuerzo" en los comienzos de la década del '70, como él explica. "Yo vivía en la calle Sáenz Peña con mi papá, y cuando salía de trabajar, me venía a hacer mezcla y a levantar las paredes y el techo. Dejábamos las herramientas guardados en una piecita del fondo y los materiales quedaban casi a la confianza pública, pero nadie tocaba nadie. Se imagina una cosa así en los tiempos actuales, no quedaría nada", reflexiona.

La esposa de Rodolfo, Raquel Carrizo, recordó la actividad que había en el ex Matadero Frigorífico Mendoza y sus corrales, que funcionaban a pleno, a poca distancia de las casas, cruzando la calle Joaquín V. González.

Carmen Vicencio, otra de las antiguas residentes, señala que la barriada fue olvidada por distintos gobiernos municipales, aunque rescató que el de Alfredo Cornejo "se está acordando un poco de nosotros". Como es posible corroborar en otros barrios del Gran Mendoza, al principio no hubo ningún servicio para los estoicos habitantes, y de a poco a poco fueron consiguiéndose la luz, el agua, el gas y las cloacas. Estas últimas llegaron en 1988, en la administración del peronista Rubén Montemayor.

Otro antiguo del lugar es Rodolfo Chaves, yesero de oficio. "Hice esta casa hace 24 años; acá estamos muy cómodos con mi esposa". Fue él y la señora de Picco, Raquel, quienes pidieron que se destacara la gestión de la unión vecinal que encabezó Amalia Sánchez, ya fallecida, quien gestionó y peleó por muchos de los servicios, especialmente en la época del gobierno militar que arrancó en 1976.

"Recuerdo que de mi lote tuve que sacar los alambres del antiguo viñedo", aportó Rodolfo, cuyo hijo, del mismo nombre, trabaja en diario Los Andes.

Los vecinos mayores se acuerdan de cuando no estaba el Corredor,  y no había interferencias para ir hacia el oeste. Ahora al costado de ese camino de doble mano, corre el canal El Jarillal, y al lado hay un amplio predio descampado, de feo aspecto, que inclusive es terreno propicio para que algunos arrojen basura.

La gente quiere que allí se construya un espacio verde, en el formato de una pequeña placita. Los vecinos más antiguos de Los Olmos, según el testimonio de los residentes consultados, son Marconi, Cataldo, Torres, Gay, Sosa, Santillán, Avendaño, Zucatto y Vallejo.

El pequeño barrio descripto y en general toda la zona, se han jerarquizado con la instalación, hace varios años, de importantes supermercados, y la estación de servicios de Joaquín V. González.

Otras instalaciones que gravitan son el barrio El Cardenal, el muy poblado El Trapiche y los monoblocks Petroleros y El Carmen, además del barrio privado Las Pircas, que cerró con un muro la circulación de la calle Soler, una de las arterias internas del barrio.

Cordones, cunetas y más iluminación

Actualmente el barrio está en obra, ya que en el costado sur, sobre la calle El Nihuil, se están construyendo cordones, cunetas y banquinas. Los trabajos se extenderán a todo el perímetro, con una inversión de un millón de pesos.
Además, como refirió Jesús Minacapelli, de Relaciones con la Comunidad se colocarán en todo el perímetro 800 luminarias nuevas (luz amarilla y de bajo consumo).

Como se ha expresado, otra intervención municipal que se espera es junto al Jarillal y de esa forma convertir un espacio perdido, de desagradable aspecto, en un rincón con césped y algunos juegos infantiles.

En el límite

En la Municipalidad de Godoy Cruz, ante una consulta de este diario, señalaron que el barrio Los Olmos se encuentra en jurisdicción de la localidad de El Trapiche. Sin embargo, no pocos vecinos comentaron que para ellos la zona pertenecía a Villa Marini. En el mapa departamental del municipio, este barrio figura en el distrito ciudad.

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