La factura de la luz incluye un monto que se cobra por el alumbrado público municipal. Ese importe es fijado por el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE), pero ahora deberá definirlo cada municipio y se espera que lo hagan antes de fin de año.
Si bien desde el ente regulador buscan que no haya una variación significativa, las comunas tienen la facultad constitucional de fijar sus tasas, por lo que podría haber incrementos.
La presidenta del Epre, Jimena Latorre, explicó que "la ley de presupuesto de este año introdujo una modificación a la del marco regulatorio del suministro eléctrico (6.497)". La normativa establecía que las distribuidoras retenían un monto por el servicio de alumbrado público, para que cada municipio lo usara para pagar la electricidad y el mantenimiento de las luminarias.
Además, existía un fondo compensador solidario, porque hay comunas que son deficitarias debido a las características del territorio, mientras a otras les sobraba dinero y aportaban más a este financiamiento. En esto influye mucho la extensión del departamento y la cantidad de habitantes (cuanto mayor es la concentración de vecinos, el monto del alumbrado se reparte entre más personas).
Sin embargo, la modificación en el presupuesto 2018 eliminó este fondo compensador solidario y lo convirtió en un subsidio para los municipios que tienen un déficit. Asimismo, detalló Latorre, se apuntó a que "cada comuna asuma su consumo real por el alumbrado para incentivar el ahorro". La ley prevé financiamiento que les permitirá encarar la reconversión a luminarias led.
A partir de este cambio en el marco regulatorio, cada municipio puede decidir cobrar el alumbrado público con las tasas municipales -algo poco probable por el bajo porcentaje de recaudación municipal- y pagarle a la distribuidora, o pedirle a la empresa o cooperativa del servicio eléctrico que lo siga incluyendo en su factura. Para ello, deberán firmar acuerdos de cobro.
Pero sobre todo, las comunas pueden fijar el monto que cobrarán por este concepto. Por el momento sigue vigente el cálculo a partir de una grilla que estableció el Epre y que determina un valor a pagar en función del tipo de usuario, la tipología de luminaria (mercurio, sodio, led) y la distancia entre los artefactos, que se aplica a todo el territorio provincial. Hoy, un usuario residencial promedio paga unos $ 200 por esta tasa.
La titular del Epre comentó que si bien los municipios tienen la facultad constitucional de fijar sus tasas, se está trabajando con ellos para que el monto sea razonable. Esto, porque se pretende que la tasa por el alumbrado público no dispare el valor de la factura de electricidad. También ya que, especialmente en el Gran Mendoza, podría ocurrir que los valores fueran muy dispares para quienes viven de un lado u otro de una calle que es límite departamental.
Algunas comunas, detalló, están analizando la posibilidad de implementar un porcentaje de la boleta y otras en hacer una adaptación de la grilla actual. Pero la mayoría, señaló Latorre, ha mostrado interés en mantener un criterio similar al actual de determinación del importe.
Latorre indicó que los municipios tienen hasta fin de año para elaborar un plan de cambio de luminarias y acceder al financiamiento, de modo de ir generando un ahorro y que dejen de necesitar el subsidio. De todos modos, planteó que no se les quitará este soporte de modo abrupto.
Julio Gallego, gerente de la Cooperativa Eléctrica de Godoy Cruz, comentó que siguen cobrando por alumbrado público lo mismo que les indicó el Epre, que ronda en los $ 91 (mensuales). Pero añadió que en los próximos días está previsto que firmen un acuerdo con el municipio, una vez que lo autorice el ente regulador, y que aún no tienen detalles del monto y modalidad.
Fuentes de Edemsa mencionaron que están avanzando en un convenio con Capital -no aún con otros departamentos- y subrayaron que la empresa sólo se encargará del cobro, ya que el alumbrado público es responsabilidad de las comunas. En tanto, el gerente general de Edeste, Raúl Stasi, se encuentra de viaje pero adelantó que todavía no han avanzado en contratos con los municipios de la zona Este.
Capital y Godoy Cruz analizan cambios
El secretario de Integración Institucional de Capital, Claudio Romano, explicó que las municipalidades están emitiendo las ordenanzas por las cuales se apropian de la administración del alumbrado público, ya que si bien es competencia municipal, está en manos de las prestadoras del servicio eléctrico. Y después, fijan una tarifa por este concepto o, como en el caso de la comuna capitalina, adhieren a la grilla del Epre.
Romano recordó que el sistema solidario llevó a que los municipios superavitarios financiaran a los deficitarios, pero también a algunas ineficiencias, como la colocación indiscriminada de luces de alto consumo eléctrico.
Además, el fondo no era suficiente y la provincia debía suplementarlo. De ahí que el gobernador decidiera modificar el sistema y favorecer el cambio de luminarias por led.
El funcionario capitalino señaló que "estamos por firmar contrato con Edemsa y hemos sometido el modelo de convenio a la supervisión del Epre".
Esto, porque pese a que la ley no lo establece, prefirieron contar con el aval del ente fiscalizador. Por el momento, explicó, mantendrán los montos actuales, pero pueden pedir una revisión cuando lo consideren conveniente. En Capital, entre 18% y 20% de las luminarias son Led y las restantes, en su mayoría, de sodio.
Desde la comuna de Godoy Cruz detallaron que están esperando algunas definiciones sobre montos que se le adeudan al municipio, para determinar si con esos fondos se puede financiar el cambio de luminarias.
Hasta ahora, han pasado a Led unos 4 mil artefactos de un total de 18 mil (22%) y existe un plan de dos años para seguir avanzando en el reemplazo con financiamiento de la Secretaría de Energía de la Nación. De todos modos, manifestaron que no está pensado trasladar el costo de la reconversión al vecino, para evitar un incremento adicional.