Las galas de la televisión y el cine son ámbitos donde los diseñadores internacionales se juegan sus mejores cartas. Y las estrellas del momento son las que ofician de maniquíes para la ocasión. Es un buen trato: yo te visto a cambio de que difundas mi maison.
El problema es cuando el diseñador se pasa de rosca y le impone a la celebridad un atuendo que no sólo no la favorece sino que la ridiculiza. Es que, veamos, no todas las chicas-Hollywood, por muy bonitas que sean, tienen las condiciones de una modelo.
Pero, además, la alfombra roja no es una pasarela de diseño sino un muestrario muy ecléctico y fuera de contexto.
Así las cosas hay aciertos tan extraordinarios en esa sociedad entre actriz y casa de moda, que potencian aspectos de la estrella -y el vestido- que de otro modo hubiesen pasado inadvertidos.
Y hay otros, tan pero tan poco felices, que destruyen en apenas una noche el tiempo de marketing que actriz y diseñador emplearon en sus propias personas y proyectos. Acá, nuestra una mirada sobre estas combinaciones de pasarela sui géneris de los Emmy 2016.
Emily Ratajkowski
Ella tiene un cuerpazo que admite este vestido pegado de seda al cuerpo, el escote y el color: súper sentadores. Exótica.
Claire Danes
En “Stardust” la actriz probó que esto de volverse una estrella luminosa le queda perfecto. Aquí, volvemos a constatarlo.
Emilia Clarke
La hermosísima actriz no calculó que, sin bronceado, el rosa nude y un pelo tan oscuro son una combinación muy poco feliz.
Pryanka Chopra
optó por un vestido rojo con recortes a los lados y falda de princesa que combinó con un labial del mismo tono. A ella, morena, la elección le sienta perfecta.
Maisie Williams
Divina la ‘nenita’ de “Game of Thrones”. Claramente eligió un look perfecto para explotar una sensualidad que, por supuesto, le desconocíamos. Súper chic, elegante, fresca y sexy.
Robin Wright
Bella, elegantísima, es esta actriz a la que todo le queda bien.
Sofia Vergara
Fiel a su imagen de latina hot en este modelo, demasiado vulgar.
Kristen Bell
Deslumbró en un vestido de gala de chiffon color champaña, con la cantidad justa de brillantes en su estampado de flores. Deliciosa, leve, vaporosa... ninfa.
Tori Kelly
Le dio la bienvenida al otoño con su traje negro sin tirantes de terciopelo y corte de sirena. Se ciñó la máxima: “menos es más” y, aunque no deslumbra, tampoco desentona.
Emmy Rossum
Demasiado convencional. Ni un mínimo color a tanto blanco.