Inglaterra vapuleó a Bulgaria por las eliminatorias para la Eurocopa 2020, pero la nota negra de la jornada fueron los gritos racistas de los hinchas búlgaros contra los futbolistas ingleses.
Por esa razón la Federación Inglesa de Fútbol (FA) pidió a la UEFA que investigue sobre el caso. A raíz de esto el presidente de la federación nacional de fútbol de Bulgaria renunció a su cargo.
Borislav Mijailov, el arquero de la selección que alcanzó las semifinales del Mundial en 1994, presentará su dimisión el viernes ante el comité ejecutivo de la federación, informó la entidad en un comunicado.
"Podemos confirmar que varios jugadores ingleses fueron objeto de abominables cánticos racistas durante el partido clasificatorio para la Eurocopa-2020 ante Bulgaria. Es inaceptable en cualquier nivel de la competición", escribió la FA en un comunicado.
"Pediremos a la UEFA un comunicado urgente" sobre esos hechos, prosigue la FA, que indicó ser "tristemente consciente de que no es la primera vez en que nuestros jugadores son objeto de este tipo de insultos".
Este lunes en Sofía, el protagonismo inesperado recayó en los insultos racistas y gritos de mono proferidos por una parte de la afición búlgara hacia los jugadores ingleses, lo que conllevó la interrupción del partido por el árbitro en dos ocasiones.
Una tribuna del estadio Vasil Levski de Sofía fue cerrada para el partido por gritos racistas en los duelos de junio ante Kosovo y República Checa, lo que no evitó que Tyrone Mings, Marcus Rashford y Raheem Sterling sufrieran los insultos racistas.