La historia de nunca acabar. Quejas por los fallos arbitrales, bochorno y violencia. La imagen de la terna arbitral conformada por Matías Ferreyra, Lucas Río y Luciano Arias ingresando a las corridas en el túnel de la cancha de Gutiérrez mientras un grupo de violentos los agrede con todo tipo de proyectiles es realmente tristísima y resulta una mancha más para el devaluado fútbol mendocino.
El mismo miércoles, el presidente de Gutiérrez, Carlos Quiroga, elevó una nota dirigida al presidente de la Liga Mendocina de Fútbol para denunciar la "pésima" actuación de Ferreyra que "incidió en el resultado" en contra de su institución y solicitó que el partido sea reprogramado con una "terna arbitral seria".
Por esa razón, el jueves por la noche, en el edificio de la Liga, hubo una reunión entre los titulares de dos asociaciones arbitrales de Mendoza, consejeros y dirigentes de los clubes con la intención de resolver los temas de violencia que están ocurriendo en nuestro fútbol.
"Somos nosotros los que vamos en pos de mejorar la inseguridad en el arbitraje de la Liga Mendocina de Fútbol. De ninguna manera queremos parar el fútbol como andan diciendo. Obviamente que si el fútbol de Mendoza para, va a ser por los actos de violencia que se producen a diario y no porque los árbitros quieran parar", comentó Fernando Espinoza, árbitro internacional y presidente de ACAMA (Asociación Civil de Árbitros Mendocinos Asociados). En tanto, su colega Paolo Conte -titular de UMA-, expresó que "es un tema que va en conjunto entre dirigentes, árbitros, seguridad, etc. Si entre todos no colaboramos, esto se va a poner complicado y más en las instancias finales".
En su nota, Quiroga también aduce que Ferreyra "festejó el triunfo con los jugadores del CEC", lo que fue desmentido por Espinoza en una nota que presentó ayer en el ente madre.
