Luego de los triunfos en los dos primeros partidos del torneo, ante Groenlandia (33-20) y México (33-16), Argentina enfrentó a Chile para definir el primer puesto, situación que se repitió en el último Panamericano de Buenos Aires. Aquella vez, a Los Gladiadores le alcanzó con el empate para llevarse su zona, resultado que finalmente se dio. Esta vez, en Canelones, y con idéntico panorama en la previa que en el 2012, el triunfo quedó para Los Gladiadores. Aunque esta vez fue de forma contundente, confirmando que es el candidato junto a Brasil para quedarse con la 16° edición del torneo.
Argentina mostró su mejor versión en lo que va del torneo, no sólo por el juego desarrollado durante los sesenta minutos sino por el rival que tuvo enfrente, un Chile que en los últimos partidos había complicado a Los Gladiadores y que se propuso como objetivo en la previa de dar el golpe de escena ante los candidatos.
El comienzo arrasador de los dirigidos por Eduardo Gallardo con un parcial de 8-1 aplastó aquella ilusión chilena. Con Matías Schulz en el arco sumado a varios destellos de Diego Simonet y un Federico Pizarro -8 goles- efectivo en cada contragolpe, Argentina fue sacando importantes diferencias en el resultado.
En contrapartida con el buen andar de Los Gladiadores, Chile sufrió los primeros veinte minutos del encuentro. Muchos errores técnicos y de manejo, en varias oportunidades provocados por la buena defensa argentina, fueron el denominador común de ese pasaje del encuentro para el equipo de Fernando Capurro. Ni siquiera cuando Chile consiguió superar la muralla propuesta por Carou y compañia, pudo progresar, porque enfrente tuvo a un Schulz que siguió sumando atajadas. Recién en la última parte del primer tiempo, aprovechando el recambio de piezas propuesto por Dady Gallardo y con Fernando Barrientos como valuarte en el arco, Chile encontró el camino para poder descontar y decorar un 16-12 en contra, que por lo menos dejaba la esperanza de recuperación y expectativa para el complemento.
Sin embargo, nada cambió en los segundos treinta en donde Argentina volvió a tomar riendas del juego en el arranque. Esta vez con una defensa un poco más avanzada con Pablo Portela a la cabeza. Nuevamente Chile atravesó un importante lapso de errores que fueron determinantes para el resto del partido. La buena circulación en ataque, con conexiones entre Sebastián Simonet y Carou primero y entre el propio Sebastián y su hermano Diego Simonet después, terminó de romper el poco equilibrio que le quedaba al encuentro. Fernando García, que ingreso por Schulz promediando la segunda etapa, continuó cerrando el arco argentino y Damián Migueles se sumó al firme andar en ataque. Con ese último panorama de juego, ya nada pudo hacer Chile para reaccionar y quitarle el triunfo a la Selección Argentina. Contundente 34-19 y primer lugar en la Zona B. Ahora se vendrá Uruguay en semifinales, el próximo sábado a las 14.
Formación inicial: Matías Schulz, Federico Pizarro, Federico Vieyra, Sebastián Simonet, Diego Simonet, Federico Fernández, Sergio Crevatin.
Goleadores: Federico Pizarro (8), Diego Simonet (7), Damián Migueles (4), Leonardo Querin (3). Pablo Simonet (2), Facundo Cangiani (2), Juan Pablo Fernández (2), Adrián Portela (2), Federico Vieyra (1), Gonzalo Carou (1), Sebastián Simonet (1) y Federico Fernández (1).
