Las reuniones paritarias para fijar el aumento salarial de la administración pública se vienen sucediendo una tras otra, y ayer fue el turno de los funcionarios judiciales, uno de los sectores mejores pagos, si se los compara con otros sectores del Estado.
En concreto, el Gobierno se valió de la misma estrategia que utilizó con otras dependencias y ofreció un 15% en dos veces: 9% en febrero y 6% en julio.
Y tal como sucedió con los otros gremios, en este caso la la Asociación de Funcionarios Judiciales rechazó de plano la propuesta, por lo que el Gobierno se comprometió a mejorarla en vistas al 8 de febrero, día en el que se vuelven a reunir para seguir las conversaciones.
“Vamos a avanzar en una propuesta que involucre otros aspectos además del netamente salarial”, informaron.
Esta paritaria en cuestión se trata de “una segunda parte” que tiene el Poder Judicial. Hace una semana, los empleados judiciales tuvieron su mesa de negociación aunque, por la interna gremial, el Gobierno consideró que no estaba en claro la representación y no alcanzó a realizar su oferta.
En cambio, esta otra negociación es con los funcionarios, comprendidos entre las clases jerárquicas 1, la más alta y 7, la más baja dentro de la carrera judicial.
El compromiso del Gobierno fue mejorarles la propuesta, lo que podría trasladarse al 17% en dos veces, si se tiene en cuenta las experiencias anteriores.
En este sentido, la oferta fue igual tanto a ATE como a Ampros y al SUTE, en las primeras reuniones paritarias. En el caso del primer gremio, en las charlas posteriores cerraron en un 17% para los no profesionales de la Salud.
En el Gobierno adelantaron, sin confirmar números, que las discusiones que vienen se darán dentro de este marco y con la intención de finalizarse antes de que termine febrero.