Una gran parte de las farmacias de la provincia funcionan, además de la atención al público, con servicios de entrega. No se trata de una solución para evitar que la gente salga por la pandemia, sino un sistema que lleva usando hace años para que los enfermos puedan recibir sus remedios sin salir de casa. Claro está, que con el escenario de cuarentena, la cantidad de envíos a domicilio se multiplicaron.
Con el mismo espíritu, ahora los comerciantes de otros rubros podrán enviar sus productos a sus clientes. Esto implica que, lejos de ser una estrategia puramente comercial para evitar pérdidas económicas totales, se considera que muchos comercios venden artículos "esenciales" y que, con las medidas sanitarias adecuadas, resultará más seguro enviar un repartidor que hacer que el resto del público asista al local.
"Los negocios de alimentación están exceptuados, pero para que se preste un buen servicio se va a tener que trabajar con protocolos muy estrictos para cuidarnos del virus", comentó Fernando Barbera, titular de la Asociación de Empresarios Gastronómicos y Hoteleros de la provincia (Aegha).
El empresario señaló que no se trata de un servicio tradicional, como el que se presta cuando la gente hace pedidos de comida en reuniones con amigos. "El espíritu de la medida es ayudar a controlar el avance de la pandemia, reduciendo al mínimo la cantidad de gente que sale de sus hogares para buscar alimento, especialmente cuando se trata de sujetos de riesgo como adultos mayores, o personas en cuarentena", comentó.
En todos los casos, las empresas deberán proveer a los repartidores de elementos de higiene (alcohol en gel y un espacio para que se higienicen las manos antes y después de entregar un pedido), y se le solicitará a quienes reciban la comida que hagan lo mismo antes de ingerirla.
En el sur de la provincia se vive la misma situación que en el centro y en todo el país. Por eso Mayra Girala, directora de la Cámara de Comercio de San Rafael, explicó que se han organizado con los asociados para que se cumplan con las medidas dispuestas por las autoridades, y al mismo tiempo bajar información sobre los términos y condiciones.
De acuerdo con Girala, como se exceptuó de la normativa a aquellas actividades económicas que implican la venta de "esenciales", como alimentos, productos de higiene y remedios, todos estos rubros se están organizando con envíos a domicilio.
"Solamente se está haciendo delivery de las actividades autorizadas, como farmacias, carnicerías y verdulerías. Hemos recibido consultas de jugueterías y perfumerías, pero les hemos explicado que no pueden ser incluidos. Hasta ahora los envíos están funcionando bien y ayudan a personas que cocinan comidas integrales, celíacos y alérgicos a ciertos alimentos", destacó.
El momento de las apps
Las apps de envío como Glovo o Pedidos Ya, podrían ser las grandes aliadas de los comerciantes en este marco. Es que hasta la fecha, según explicaron desde la primera de ellas, "los mendocinos las han utilizado para comprar productos para abastecerse, o higienizarse (alcohol en gel, jabón, leche infantil, pan y atún)".
Por su parte, desde Uber Eats indicaron que "la plataforma tendrá costo de envío gratis en los pedidos de más de 30 mil restaurantes locales y pymes de Argentina y Latinoamérica con el fin de generar ventas incrementales para estos establecimientos y, a la vez, ayudar a las personas que necesitan acceder a la entrega de comida a domicilio". Adicionalmente, la compañía facilitará la inscripción de nuevos negocios.