Mientras Oscar Riera (42) estaba en medio de los preparativos para el cumpleaños número 12 de su hija Camila, junto a la mamá de la pequeña, recibió un llamado que le cambió la jornada, el año y posiblemente la vida entera. Es que en medio de la vorágine diaria escuchó la voz de la reconocida periodista y locutora Laura Carbonari quien le comunicó que era el ganador del sorteo "El afortunado" de Los Andes Pass, por el cual se hizo acreedor de un sueldo de $ 30.000 por mes durante un año.
Totalmente sorprendido, ya que tal como aseguró "nunca antes había tenido suerte en ningún concurso", el hombre recibió la noticia y la compartió con su familia. Este premio le llegó en un momento inmejorable, ya que hace dos años se quedó sin trabajo y decidió sumarse a un emprendimiento propio junto a su papá. Al ser un negocio en crecimiento sufre diariamente con los embates de la crisis económica, pero con esta entrada fija por 12 meses tendrá la oportunidad de hacerlo crecer. "Al dinero te lo podés gastar muy fácilmente comprando cosas, pero nuestra idea es invertirlo, afianzarnos como una empresa familiar, establecernos físicamente, tal vez sumar un cobrador y un vendedor", adelantó Oscar con gran felicidad.
A través de su emprendimiento él comercializa muebles y artículos del hogar tales como mesas, sillas, camas, colchones, mobiliario de cocina, así como una línea de metalúrgica que desarrolla churrasqueras, planchetas, discos, entre otros.
"Trabajamos por catálogo y damos créditos a sola firma a personas que conocemos o amigos de amigos", contó, a la vez que detalló que en su mayoría no están bancarizados, ya que son independientes y no tienen bono de sueldo. Por el momento en la empresa no trabajan con stock porque no tienen un espacio físico, pero el emprendedor prevé que con esta suma fija podrán alquilar un pequeño salón para tener algunos modelos de los muebles y artículos que venden. "En este país siempre es complicado emprender, porque cuando todos pechan para atrás vos querés pechar para adelante. Pero igualmente apostamos a tener nuestro propio negocio familiar y este dinero nos va ayudar un montón", manifestó.
Le llegó la suerte
Si bien Oscar sabía del concurso de Los Andes Pass, nunca pensó que su nombre saldría sorteado. "De hecho cuando me llamó Laura me puse a pensar adónde había mandado cupones, pero me acordé que yo no había hecho nada, porque con solo tener la tarjeta ya estaba participando", comentó. Inmediatamente se lo contó a la mamá de su hija con quien estaba trabajando en los preparativos del cumpleaños. "El llamado fue justo a las 12.30, la misma hora en la que nació Camila hace 12 años", destacó asegurando que se trató de un regalo del destino.
Cuando su hija llegó con sus compañeros de la escuela no le contó nada porque estaba entretenida, y esperó hasta la noche para darle la noticia. "Estaba encantada porque aunque no tiene mucha noción, sabe que el dinero nos viene muy bien. Es más, ya está pensando el destino para irnos de vacaciones", resaltó con simpatía el hombre que vive en Guaymallén.
