El cordobés José María López ganó ayer la primera carrera de la undécima fecha del Mundial de WTCC sobre el circuito tailandés de Buriram y se proclamó -por segunda vez consecutiva- como campeón a bordo del C-Elysée del equipo Citroën.
Largando desde el mejor lugar, Pechito dominó la carrera y nunca fue inquietado por su coequiper, el francés Sebastien Loeb, que terminó segundo. En tanto que el también francés Yvan Müller, su otro coequiper y rival por el cetro, fue víctima de un incidente perdiendo toda chance de luchar por la corona.
Para el argentino de 32 años fue su novena victoria en la actual temporada, que finalizará el 27 de este mes en Qatar. “Fue un campeonato difícil, con mucha presión. Gracias a todos los argentinos que se levantan temprano y me apoyaron el 100% durante toda mi carrera; esto es para ellos”, manifestó el volante cordobés nacido en Río Tercero.
En la segunda final, el luso Tiago Monteiro (Honda Civic) ganó en pista por delante de Loeb, el chino Ma Qing Hua y López. Pero siete horas después, Monteiro fue excluido en la verificación y Pechito accedió al podio de una carrera detenida antes de tiempo porque la noche empezó a caer en el circuito.