La gran final del MSI 2018 enfrentaba a dos de los mejores equipos del planeta. KingZone DragonX, campeón de la mejor liga del mundo, y Royal Never Give Up, aspirante a dominar el futuro de League of Legends. LCK contra LPL, la final más competitiva.
El equipo chino había dejado en la estacada de una forma contundente a Fnatic, dominando la serie por 3-0.
El equipo coreano, por su parte, había sufrido un poco más para eliminar a Flash Wolves, que acabó sucumbiendo por 3-1.
No hubo sorpresas en el juego definitorio. De la mano de Uzi, que volvió a mostrar que es el mejor del mundo, los chinos dominaron la partida y se quedaron con el título tras un 3 a 1.
Los fanáticos mendocinos siguieron las alternativas del match en un Teatro Recreo colmado más allá de que se inició a las 7 de la mañana.