Debe organizar peñas para recaudar los fondos suficientes y estar presente en cada fecha. Amaga con ausentarse cuando el dinero no alcanza pero, gracias a la ayuda de sus allegados, puede acelerar el Chevrolet Classic que estrenó en la vigente temporada de Clase 3.
El auto está hecho íntegramente en San Rafael. Su padre Daniel está al frente del equipo y Matías se encarga de llevarlo lo más adelante posible. Como sucedió ayer en el autódromo Roberto Mouras de La Plata, en la quinta cita del Turismo Pista que a veces actúa como “telonero” del TC 2000.
Ya con una victoria parcial en el bolsillo tras adjudicarse su serie del pasado sábado, el mayor de los Antolín alcanzó el podio que pensaba desde antes de salir a pista. “Atravesamos un gran nivel pero los resultados no se daban. Me tenía fe porque, en las últimas fechas, el auto mostró buen equilibrio de chasis y el motor arrojó mucha potencia”, afirmó quien fuera campeón en Clase 2 del Zonal Cuyano.
“La meta es estar en el podio y porque no en el escalón mas alto”, decía el rubio piloto. Largando desde el tercer cajón en la final, nuestro representante aprovechó el ingreso del auto de seguridad apenas iniciada la carrera por el despiste de Juan Ferrety (Renault Clio). Es que, tras la reanudación en el tercer giro, superó a Jonathan Baldinelli (Clio) en el difícil curvón para acomodarse detrás de Juan Cruz Talamona (Clio), el líder.
Ambos lucharon por su primera victoria en la categoría. El sanrafaelino buscó en varios sectores del trazado pero Talamona tapó bien los huecos.
El cierre llegó antes de lo previsto ya que la prueba finalizó por tiempo. Así, la cuadriculada cayó primero sobre Talamona y con Antolín como escolta. “Esto es para mi viejo y la gente que tanto apoya. Me siento feliz”, lanzó Matías.
Cáceres desertó y perdió la punta del campeonato
Llegó a la cima del torneo en la segunda cita de Concordia, donde obtuvo dos podios. Se mantuvo arriba en Buenos Aires y San Jorge, por lo que llegó a La Plata con la misión de defender el liderazgo. Lo hizo bien hasta el Sprint, luego de finalizar segundo.
Sin embargo, la racha de puntos gordos se terminó ayer para Emmanuel Cáceres. Un toque de Juan Ángel Rosso cuando marchaba en el décimo lugar y la rotura de la caja de cambios -a falta de seis vueltas para el banderazo- lo obligaron a abandonar.
Encima, el poleman Antonino García se dio el gusto de vencer de punta a punta con su Ford Focus y accedió al sitio de privilegio en el torneo, aventajando a Peluche por 26,5 unidades. “Empecé a tener problemas eléctricos, por eso dejó de funcionar la caja de velocidades al no responder el ‘paddle shift’ del Fiat”, afirmó el sanmartiniano.
Augusto Scalbi fue segundo en su primera experiencia con el Peugeot 408, mientras que Pablo Vuyovich arribó tercero logrando su segundo podio al hilo con Ford.