Cuando luego del rechazo de la Justicia a un amparo parece acallarse la controversia protagonizada por ONG ambientalistas contra de la pulverización aérea para combatir la Polilla de la Vid, el Gobierno muestra orgulloso los números del discutido operativo. Para Iscamen, el mix agroquímicos- feromonas ya logró bajar 65% la presión de la plaga en 130 mil hectáreas, lo que animó al gobernador Cornejo a aventurar la chance de eliminarla.
“Ni los técnicos más avezados lo creían posible pero ya se logró reducir 65% el área afectada, y aspiramos al 100%. De seguir así con tres años ininterrumpidos podremos eliminarla totalmente”, señaló Cornejo, poniéndose al frente del anuncio.
Asimismo, con el antecedente de la convivencia con la polilla en Chile o Francia y el caso de éxito de Estados Unidos. Según el mandatario, confiado en la decisión del juez Carlos Dalla Mora de darle continuidad al operativo, “seguiremos con los mismos protocolos validados técnica y judicialmente”.
Una certeza reafirmada por el ministro de Economía Martín Kechner, al calificar como “épica” la campaña actual, “ya que en tres años se había perdido 30% en promedio de la producción”.
"No se comprobó contaminación"
De todos modos, tras repasar resultados por oasis, el titular de Iscamen, Alejandro Molero, admitió que habrá que esperar la segunda etapa (ver) para confirmar si sigue profundizándose la reducción.
“Lo que se hizo fue con tecnología de punta, amigable con el medioambiente y productos inocuos”, señaló Molero, a cuyo criterio las muestras que organizaciones ambientalistas recogieron para frenar las pulverizaciones aéreas “son de zonas donde el tratamiento lo hicieron productores y no aviones”.
En tal sentido, Kerchner subrayó que "se aportaron innumerables datos científicos de instituciones que durante un año estudiaron el mejor método. Y no se comprobó un caso de contaminación". Acerca de la exigencia de una Evaluación de Impacto Ambiental, consideró "extraño" que "se busque más burocracia ante una emergencia. De haber esperado se hubiera perdido mucha más producción".
Entre el mix y sólo feromonas
Con sensación de misión cumplida (reducir la presión y achicar de a poco la “mancha” del mapa de zonas cuarentenadas), el Gobierno proyecta reenfocarse sólo en la Técnica de Confusión Sexual que fue la primera versión del Programa nacional.
Sobre unas 130 mil hectáreas afectadas, 64626 se trataron sólo con TCS. Y de acuerdo a Molero “así se logró erradicar la plaga de la zona Sur de la provincia”.
En general, el balance arroja más de 5 mil productores de 6.954 fincas capacitados. Dentro de ese universo, más de 20% recibieron agroquímicos para pulverizar 28.213 hectáreas.
Al comparar métodos, en el Sur se aplicó sólo feromonas, al igual que en 10 mil hectáreas del Valle de Uco y en otras 40 mil del oasis Norte-Este. En tanto, ante ataques más virulentos (eje Maipú-Luján, por ejemplo) emplearon el “combo” con insecticidas de bajo impacto.
El informe señala que las pulverizaciones aéreas se concentraron en las áreas más complicadas. Concretamente, unas 100 mil hectáreas entre norte de Maipú, parte de San Martín, Lavalle, Santa Rosa y Rivadavia, donde seguirá puesta la lupa hasta tener datos de la segunda alerta.
Presupuesto 2018: según Iscamen, sólo con feromonas se necesitarán u$s 23 millones
Molero admite que los fondos no están asegurados aún. Pero lo concreto es que para encarar la campaña 2018, el programa de Control y Erradicación de Lobesia Botrana necesitará tanto dinero como este año con la salvedad de que sería sólo para la compra de difusores de feromonas.
Durante 2017, por ley, Iscamen y Senasa dispusieron de algo más de $400 millones ($350 millones aportados por la Nación) para adquirir agroquímicos (Coragen- Bacillus Thurigensis) y feromonas de confusión sexual, considerado en el mundo el método más efectivo. Para 2018, en cambio, sólo importar difusores como quiere la Provincia insumirá unos u$s 23 millones.
Al respecto, Kerchner reconoció que “este presupuesto no lo tenemos todos los años. Se necesita seguir con la campaña el que viene y mantenerla en 2019”.
Por su parte, Molero consignó que “hay que pelear los fondos en la Nación” dentro del Fontagro, un fondo de cooperación entre países de Latinoamérica, Caribe y España para seguridad alimentaria.
Sin embargo, el coordinador local del Programa, Guillermo Azin, evaluó que "aún hay zonas donde probablemente se deba seguir combinando técnicas". Son unas 45 mil hectáreas bajo monitoreo, sin contar otras 15 mil abandonadas donde no puede hacerse nada por ahora.
Salvo Luján y Valle de Uco, arranca hoy el segundo alerta para el control
Senasa e Iscamen activaron desde hoy martes 5 de diciembre el segundo alerta para el control químico/biológico de la polilla en oasis Norte, Este y Sur, excepto Luján y Valle de Uco. Allí se deberán usar productos con poder residual para proteger al cultivo hasta el 20 de diciembre.
En el caso del Sur, solo están obligados a hacer control químico productores que no implementaron la TCS esta temporada. Si un productor adquiere este insumo por su cuenta, debe consultar a Senasa, Iscamen o INTA a efectos de evitar la presencia de residuos.
A quienes incumplan con la segunda etapa de control, el Programa Nacional prevé sanciones dado que es
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En Luján y Valle de Uco se registra una demora en la evolución de las poblaciones de la plaga, por lo cual oportunamente se informará la fecha conveniente para iniciar los tratamientos.
Para mayor información, en www.senasa.gob.ar, al 0800 999 2386, al 4984131 / 4985011 o al correo lobesiamendoza@senasa.gov.ar. También en Iscamen, www.iscamen.com.ar, al teléfono 4297315 (int. 217), al 0800 666 4722 o al correo electrónico: lobesia@iscamen.com.ar.