De golpe, sin ningún tipo de aviso ni pista previa, Wilco lanzó un nuevo álbum el pasado jueves, y encima gratis. “Star Wars”, tal el nombre del nuevo trabajo de la banda oriunda de Chicago, cuenta con once canciones y estará disponible para ser descargado durante treinta días sin costo alguno en la página www.wilcoworld.net.
“¿Por qué lanzamos el disco de esta manera y por qué gratis?”, escribió en su sitio de Internet Jeff Tweedy, vocalista y fundador del grupo. “Bueno, la razón más grande es que pensamos que sería divertido, ¿Qué es más divertido que una sorpresa?”.
Hoy en día, a veinte años del lanzamiento de “A.M.”, su primer trabajo discográfico, Wilco es una de las bandas de rock más reconocidas y convocantes del planeta: encabezan los festivales más importantes a ambos lados del Atlántico y sus shows y discos son recomendados como imperdibles en los rankings de las revistas especializadas. Pero no siempre fue todo tan dulce.
El reconocimiento unánime les llegó recién con su cuarto disco, “Yankee Hotel Foxtrot” (2002), el cual significó un renovador salto hacia adelante no sólo para la banda sino para el rock en general, logrando un sonido original que en buena parte se debió a la producción de Jim O’Rourke, uno de esos genios en las sombras que a través de sus experimentaciones con silencios, cintas cortadas y mezcladas, arreglos disonantes y ritmos fracturados, logró darle a las ya de por sí atrapantes canciones compuestas por Tweedy un sonido único e innovador.
Tan innovador fue aquel resultado que Reprise Records, la subsidiaria de la Warner Bros. que había financiado el álbum, decidió que el disco no sería comercializable y le rescindió el contrato a la banda, que debió marcharse con el disco a su casa. Pero a los pocos meses, tras un boca a boca que fue creciendo a la par de shows con el grupo tocando el disco inédito en cuanto lugar les abriera las puertas, la compañía volvió a buscarlos, ofreciéndoles más dinero del que inicialmente les habían dado.
Algo similar había sucedido en 1989 con los ingleses Talk Talk, a quienes EMI les realizó un juicio por “anticomerciales” luego de que la banda se negara a regrabar su disco “Spirit of Eden”, hoy en día considerado un disco fundacional para todo un movimiento musical que más tarde se conocería como Post-Rock. Y sin ir más lejos, a Gustavo Cerati le había pasado lo mismo nada menos que con “Canción Animal”, el disco más vendido en la historia del rock en español: la mezcla y su masterización estuvieron a cargo de Daniel Melero, quien realizó el trabajo en Miami. Luego de que Melero enviara el master final a Sony Music, los directivos de la compañía llamaron espantados a Gustavo Cerati asegurando que el productor había arruinado el disco. “¿Que Daniel arruinó el disco?”, contestó el cantante de Soda Stereo, quien aún no había escuchado el resultado final. “Imposible. El disco sale como está o no sale”. Esa valentía de Gustavo para bancar a los suyos y sostener una idea creativa por sobre su riesgo comercial fue algo recurrente en toda su carrera.
Pero volvamos a Wilco: “Star Wars”, el nuevo trabajo, fue lanzado de manera gratuita justamente en una época en que el dinosaurio de la industria discográfica se está extinguiendo. Hoy en día nuevas formas de distribución surgidas a través de la tecnología se están disputando el terreno a través del “streaming”, es decir, la posibilidad de escuchar música de manera instantánea por Internet sin necesidad de descargarla. Las dos plataformas que más han crecido en este sentido son Spotify y Tidal.
La primera, creada por el sueco Daniel Ek, ya posee en todo el mundo más de cincuenta millones de usuarios, doce millones de los cuales son suscriptores pagos. “Logramos que la gente vuelva a pagar por escuchar música”, afirmaba Ek hace un par de años. Tidal, su rival, fue creada por el rapero Jay Z y apoyada por Madonna, Jack White, Kanye West, Daft Punk y muchos de los músicos más populares del planeta, un movimiento surgido en respuesta a las pocas regalías que recibían de parte de Spotify y las viejas compañías. Pero Tidal también recibió sus críticas: al parecer su plataforma –tal como siempre había sucedido con las discográficas– no le daría el lugar necesario a las bandas jóvenes, propiciando el mismo sistema de peces gordos pero cambiando de dueños.
Así las cosas, Wilco, una banda que conoció de primera mano los sinsabores de la industria, creó su propio sello y lanzó la versión digital de “Star Wars” de manera gratuita, mientras que el disco en formato vinilo y CD será editado en agosto. Un disco –vayamos al fin y al cabo a lo que importa– que suena a la altura de lo mejor de la banda, un bastión fresco para un estilo (el rock de guitarras) que poco a poco parece desaparecer a causa de la repetición insulsa de ideas por parte de agrupaciones consagradas, algo a lo que Wilco le escapa como al demonio: justamente, su frescura radica en la disposición de todos a permitir que cada uno de los aportes individuales entren en combustión con las ideas de los demás y se disparen a lugares inesperados. Así lo manifestó Tweedy en una reciente entrevista: “Nos gusta incorporar los accidentes que puedan surgir en el estudio, no somos demasiado preciosistas con las canciones, nadie en la banda impone un sonido o una manera en que deban concluir. Disfrutamos del proceso y nos entusiasma eso que podría suceder en el camino con cada una”.
Así, guiados por el talento de Tweedy para crear nuevas buenas melodías, la guitarra a la vez distorsionada y sutil de Nels Cline (hombre que viene del jazz y es considerado por muchos uno de los grandes guitarristas del momento) y las creativas baterías de Glenn Kotche, “Star Wars” encuentra su mejor forma en canciones como “More…”, “The joke explained”, “Cold slope” y “Magnetized”, las cuales poseen cierta influencia de los Beatles de la época del Álbum Blanco. Todas giran alrededor de la pieza central, “You satellite”, un crescendo de ruido y dulzura a la altura de los mejores momentos de la banda.
Hace años que se rumorea que Wilco vendrá a nuestro país, pero aún no ha sucedido. Con suerte, este nuevo disco los traerá por primera vez y nos permitirá disfrutar en vivo de uno de los mejores espectáculos de rock del momento.