Tras idas y vueltas parece que finalmente comenzará la anunciada remodelación del Parque General San Martín, espacio público que ya cumplió 120 años, imprescindible para la comunidad mendocina y los turistas que nos visitan.
La perspectiva de mejoras para las siempre vapuleadas 400 hectáreas de esta joya del pasado, sufrió demoras y contratiempos. En junio de 2016 la Subsecretaria de Obras Públicas del Ministerio de Economía e Infraestructura, junto con la Secretaría de Ambiente, lanzaron un llamado a concurso de antecedentes para el desarrollo del proyecto ejecutivo de la puesta en valor del icónico pulmón verde y también del Parque Cívico.
A esa convocatoria se presentaron 26 estudios, de los cuales fueron seleccionados 6 equipos, pero posteriormente ese proceso fue dado de baja, y en noviembre hubo otro llamado a licitación. Si bien el comité de preadjudicación y el Consejo de Obras Públicas aconsejó asignar los trabajos al grupo que había presentado la oferta más conveniente y acreditaba antecedentes suficientes, nuevamente el proceso se dio de baja.
Pero, recientemente, y Los Andes dio cuenta de ello el pasado lunes 3, se indicó que en febrero de este año se había realizado una tercera licitación y en marzo se presentaron las empresas interesadas. Aunque los procesos de este tipo suelen demorar más, desde la Dirección de Parques y Paseos Públicos se aseguró que en los próximos días se sabrá cuál empresa llevará adelante la trascendente ejecución, con un presupuesto de 120 millones de pesos. Se descarta que el Estado habrá tomado la previsión de licitar trabajos previamente desarrollados por profesionales idóneos en la intervención de un patrimonio paisajístico de la envergadura de nuestro principal paseo.
De manera independiente, se desglosó una parte del emprendimiento y sí empezaron los trabajos de iluminación de diferentes sectores del contorno.
En el medio hubo una presentación ante la Fiscalía de Estado realizada por organizaciones ambientalistas del medio para que el organismo encargado de defender el patrimonio del fisco, determine si es correcto o no talar 715 árboles, en supuesto mal estado, investigación que todavía no habría terminado. En este capítulo, las ONGs (como Cullunche y otras) coinciden en señalar que se deben sacar los forestales secos, pero sólo los secos.
Retomando el tema de fondo, la obra de gran envergadura que reclama el espacio, hay que recordar que en noviembre pasado, en los festejos por el aniversario 120 del parque, el Gobernador expresó que esperaba que las tareas se iniciaran en diciembre, también de 2016, con un plazo de 8 meses, frente a lo cual nos encontramos a principios de abril con una realidad de no inicio.
Estamos entonces ante un panorama de lógica expectativa por ver en movimiento esta remodelación tan ansiada.
Habrá que discutir luego cómo hacemos para cuidar lo que se arregle y embellezca. Un problema de nuestra idiosincrasia, cultura y respeto por el territorio de lo público seguirá en permanente debate. Decimos esto tras juzgar las fotografías de los diferentes daños que presenta el mobiliario y otras partes de la infraestructura de esta maravilla de la naturaleza, que acompañan la reciente nota del matutino.
Destrozos en los que hay siempre manos anónimas empeñadas. Sin ir más lejos, la basura acumulada tras el partido disputado entre River Plate y Godoy Cruz, y que fue limpiada por empleados de la administración, es un ejemplo elocuente del poco respeto que tenemos por los bienes al servicio del disfrute de las personas, la realización de prácticas deportivas y ámbitos de salud.
