Heroico. Con esa palabra se puede sintetizar lo de Anzorena anoche para llegar a la final del Clausura de A1, donde enfrentará a San José.
Sin el lesionado Maxi Torino, con menos talla que Rivadavia (65-73) y encima con Fede Bonini entre algodones -jugó poco por una contractura-, el equipo de la Sexta sorteó los pronósticos y se metió en otra definición
Un primer cuarto parejo. En el Naranja el goleo fue repartido. Aunque cuando Trejo ganó la zona pintada, convirtió o juntó marcas y descargó.
Por el lado del Rojo, las conversiones dependieron de Bonini y de las salidas rápidas. Esa era la premisa. Al no tener la altura del rival. La opción era salir rápido, penetrar o dar el pase extra: 16-17.
En el segundo cuarto, Rivadavia reaccionó. Movió el banco y con 8 puntos de Marinesi y la misma cantidad de García, sacó una máxima: 33- 25. Pero llegó el minuto de Suárez.
Le dio oxígeno a su equipo y cortó la racha del local. Triple de Schestakow, robo de Cantalejos y otra aparición de Bonini, pusieron a Anzorena en juego: 36-31.
El tercer cuarto fue un espectáculo. De otro nivel. A la altura de dos equipos del Federal. Palo a palo. Anzorena tuvo una racha de 8-0 y pasó al frente. Pero apareció Trejo y con 9 puntos consecutivos puso al Naranja al frente otra vez (50-49).
El Rojo lo cerró mejor desde la línea de libres e ingresó al último cuarto con un punto de ventaja: 54-55.
Heroico triunfo de Anzorena. Que dejaron el frac, se pusieron el overol y se recibieron de hombres como Cantalejos, Orrego, Garitaoandía.
No les tembló el pulso. No le tuvieron miedos a los nombres. Y con un Schestakow intratable, el Rojo ganó en el Este y quiere el Bicampeonato.