Era del León y terminó siendo del Globo. El conjunto del Pollo Videla lo dio vuelta en el complemento y terminó celebrando un triunfo ante un rival al que no pudo vencer durante todo el pasado Federal B. Tras el 2-1, con goles de Báez y Guardia para los lasherinos (Villaseca había puesto en ventaja a los del Este), ahora será el turno de enfrentar a Independiente Rivadavia, el próximo viernes.
Que el hincha empuja no hay dudas. Esas dos mil almas que se posaron sobre la Popular Norte con banderas y determinación para bancar en las buenas y en las malas mucho más, hicieron que Huracán fuera al frente desde el minuto inicial. El Globo mostró movimientos más aceitados que el Chacarero.
Desde el minuto cero tomo la iniciativa, rodeó a Cabrera para quitarle el primer pase a su rival y tuvo control de balón. Fue un mejor comienzo para el once del Pollo Videla. Presión en campo rival y velocidad para jugar en los metros finales fueron la premisa. ¿Salió bien? No del todo. Los norteños aún buscan precisión en ofensiva y ayer, con Martín y Navarro apagados, no tuvo demasiados argumentos para inquietar a Bonacci, quien apenas se lució sobre la media hora tras un centro picante de Ortiz.
El Albirrojo, mientras, inició el duelo lejos de lo pensado por Mazzola para su debut. Sin la posesión del balón, se hizo un equipo largo y quedó a mitad de camino entre salir jugando y lanzar pelotazos a los puntas. Sufrió la intensa presión de su rival y no fue claro para jugar el balón. Nada anormal si se piensa que ambos están en medio de intensos trabajos físicos.
Pero San Martín tiene a Villaseca y ese es un plus. En la única acción donde el Albirrojo encontró profundidad, se puso en ventaja. Figueroa pifió feo en un intento por cuidar el balón, Martínez lo durmió y cedió para Stipech, quien le puso el balón en la cabeza al Gato. Fue un balde de agua fría para el Globo, que había sido protagonista de la etapa, y sin embargo se iba al descanso en perdedor.
Decidido a correr riesgos, incluso quedando mal parado atrás, Huracán LH salió más decidido. Videla cambió puesto por puesto en procura de encontrarle virtudes a su equipo. Casi convierte Guardia, quien había ingresado por Ortiz, de tiro libre, y eso fue un anuncio de lo que vendría. San Martín respondió con orden y solidez defensiva, agazapado a la espera de una contra, pero nunca se dio.
El tanto de Báez (¿cuándo no?), llegó en un momento en que el Chaca parecía haber encontrado el ritmo del partido. El ‘9’ apareció para vencer las manos de Bonacci e igualar la historia. Fue un envión anímico. Enseguida apareció Guardia y el Globo se quedó con un partido donde ambos dejaron buenas sensaciones. Claro, todavía resta mucho por trabajar.