El tradicional clásico Santo Patrono Santiago se prepara para desembarcar, una vez más, en el Hipódromo de Mendoza. La carrera más importante del oeste argentino tiene un total de doce anotados y por ende comenzó la cuenta regresiva hacia la largada.
Este año la competencia ofrecerá al ganador una recompensa de $ 85.000 y por supuesto se espera que genere una importante concurrencia de público.
En los últimos años el Santo Patrono Santiago se ha convertido en una de los espectáculos deportivos más importantes y convocantes de la provincia.
En 2013 cerca de 30.000 personas presenciaron la gran victoria del sanjuanino Honor Charrúa en la contienda. El número no es un dato menor, sobre todo teniendo en cuenta de que esa cantidad de público no suele verse ni siquiera en los escenarios futboleros donde juegan los equipos más importantes de la provincia.
El Santo Patrono Santiago es todo un acontecimiento para la sociedad mendocina y su ganador lo es mucho más. En esta edición la competencia cuenta con un total de doce participantes, entre los que se destaca el local Pixar.
El zaino de Enrique Rivamar ya ganó este año el Vendimia y buscará un doblete clásico que lo destaque entre los mejores de la historia “burrera” de la provincia.
Pixar se ha impuesto en sus últimas cuatro salidas a la pista (todos triunfos clásicos) y está catalogado como el mejor caballo del medio. Su excelente campaña habla a las claras de sus enormes condiciones.
El Enemigo
En la previa nadie discute que Pixar es el caballo de la carrera, pero demás está decir que las carreras no se ganan antes de la largada. Este año el lote del Santo Patrono Santiago, tal como es habitual, tendrá sus exigencias.
El principal enemigo del gran candidato parece ser Tormentoso Moro. Este es un caballo que en Buenos Aires estuvo bajo el mando de Carly Etchechoury y suma seis victorias en los máximo (incluso corrió dos veces el Carlos Pellegrini).
Actualmente Tormentoso está afincado en Río IV, al cuidado de Lovay. El caballo está anotado, pero su presencia aún no ha sido confirmada. Que quede claro que si llega a decir presente será un hueso muy duro de roer.