Hoy llega a los cines locales "Sicario: El día del soldado", la secuela de la celebrada cinta sobre el narcotráfico que en 2015 dirigió Denis Villeneuve.
Josh Brolin y Benicio del Toro, esta vez sin Emily Blunt, vuelven a protagonizar un filme que ahora capitanea Stefano Sollima ("Suburra", "Gomorra") y que relata un nuevo capítulo de la guerra sin cuartel, y prácticamente también sin reglas, contra los cárteles mexicanos de la droga.
“Esta película es una gran oportunidad para explicar la evolución del personaje. Pero reconozco que también me intimidaba un poco porque ‘Sicario’, la original, fue una película que me gustó mucho, así que no sabía si una secuela iba a funcionar”, confiesa del Toro en una entrevista en la que también asegura que todas esas dudas se disiparon en cuanto leyó el libreto escrito por Taylor Sheridan, también guionista de la primera entrega.
En esta película, el plan de Alejandro Gillick (Del Toro) y Matt Graver (Josh Brolin) "es crear una guerra entre cárteles" para así debilitarlos y generar "el caos".
“Parte importante del plan es raptar a la hija del líder de un cartel que se llama Isabel Reyes, una de niña inocente de 15 años”, relata el actor puertorriqueño que recuerda que esta misión hará que su personaje se enfrente directamente con los recuerdos más dolorosos de su pasado.
“El personaje de Alejandro perdió a su esposa y su hija por la violencia de los cárteles, así que ahora se encuentra en una situación muy similar, actuando como aquellos que raptaron a su hija que tenía la misma edad de Isabel cuando la mataron”, apunta Del Toro que define esta situación como una “pesadilla” para su personaje porque sabe que está causando a esta niña una experiencia “muy similar al horror que pasó su hija antes de que la mataran”. “Durante ese viaje veremos cómo a Alejandro todavía le queda algo de conciencia”, sentencia.
Conciencia en mitad de una guerra
Ella, la joven que hará despertar esa conciencia en mitad del caos y la violencia en Alejandro, es la hija del capo del cártel a la que da vida Isabella Moner (“Transformers: El último caballero”), una “magnifica actriz”, dice el actor, de 16 años con la que establece “una gran conexión”.
“La historia de Isabel es muy triste”, señala la joven intérprete que define a su personaje como “una niña malcriada e ingenua” que vive “en una especie de burbuja” dentro de la que ignora todo lo que está pasando en México y será Alejandro el que muestre “todo este mundo oscuro”.
Entre los dos personajes se establecerá “una relación casi paternal”, una conexión muy especial en mitad de una guerra sin reglas “que muchas veces no necesita palabras para entenderse”.
Una relación que, revela, fue casi fiel reflejo de lo que una joven como ella siente al trabajar con una actor de tanta experiencia como Del Toro.
“Es fantástico rodar con un actor como Benicio, tan lleno de sabiduría y consejos que voy a llevar conmigo todos los días de mi vida”, dice Moner entusiasmada.
Otros estrenos en las multisalas
¡Te atrapé!
Los amigos de la historia se conocen desde hace más de 23 años, cuando eran compañeros de escuela y jugaban a perseguirse y atraparse.
El tiempo ha pasado pero pese a ser ahora adultos profesionistas con trabajos, familias, hijos y responsabilidades, siguen jugando.
Se ponen de acuerdo para verse una vez al año en algún punto del planeta con el objetivo único de jugar. Sin embargo, las cosas han cambiado y la reunión anual de este año promete ser un poco más complicada que las anteriores, ya que el único de ellos que nunca ha sido derrotado está por casarse.
La cinta es la ópera prima en cine de Jeff Tomsic. Actúan: Annabelle Wallis, Jeremy Renner, Jon Hamm, Leslie Bibb y Isla Fisher.
Gringo, se busca vivo o muerto.
Esta película dirigida por Nash Edgerton, es una comedia que coprotagonizan Charlize Theron, Joel Edgerton y David Oyelowo, en la cual un empleado de una compañía hace creer que fue secuestrado por un cártel en México.
Con su segundo largometraje, el especialista y cortometrajista australiano Nash Edgerton —hermano del actor y también realizador Joel Edgerton— ha abierto su coctelera para dar forma a un thriller tan trasnochado y demencial como sus personajes, con claras referencias al cine de Quentin Tarantino y de los hermanos Ethan y Joel Coen.