Liz Solari se dedicó, como tantas otras famosas, a diseñar ropa. Hace poco conocimos la marca de la China Suárez que recibió una lluvia de críticas por sus precios. Ahora ella, dueña de BlackMamba, se animó a reírse de uno de sus diseños (mal hechos).
La modelo se probó un vestido de su autoría que podría ser divino salvo por un percance. El escote de la espalda de éste es tan grande que no alcanza a tapar los glúteos.
Lejos de enojarse ella compartió la foto en Instagram. Una genia total...