El presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, y el defensor Daniel Díaz tuvieron una reunión en Casa Amarilla para limar asperezas, luego del video que se mediatizó el último fin de semana, en el que el dirigente criticó al jugador por los gestos que hizo cuando se fue expulsado en el Superclásico en Mar del Plata.
Por otra parte, el nuevo defensor de Boca Juniors Juan Manuel Insaurralde, procedente de Spartak de Moscú, se entrenó hoy por primera vez con el plantel que dirige Rodolfo Arruabarrena, de cara al debut en el campeonato de Primera División.
El azul y oro se medirá contra Temperley el sábado 6 de febrero, en condición de visitante, en cancha de Banfield, a partir de las 21. Mientras que Daniel Osvaldo y Pablo Pérez, quienes padecieron algunos dolores musculares en las últimas semanas, trabajaron a la par de sus compañeros y están a disposición de Arruabarrena.
En cambio, Rodrigo Bentancur sigue recuperándose de una distensión en el recto anterior de la pierna izquierda. Si bien es cierto que el desempeño de Boca dejó que desear en el verano, más allá del triunfo 3-0 sobre Emelec de Chile en San Juan, y que las derrotas ante River generaron mal ambiente en el club de la ribera, es llamativo que el mismo Carlos Tevez declarase que “el margen de error es chiquito”.
Pero ayer, la novedad fue el cónclave entre el mandamás y el capitán, tras la dura crítica del dirigente por los gestos que le dedicó a la hinchada de River al ser expulsado. Angelici fue filmado en la vía pública mientras reprobaba la actitud de Díaz y opinaba que el capitán debería ser Tevez, sin darse cuenta de que alguien registraba sus dichos.
Según fuentes del club, al término del encuentro, Díaz aceptó las disculpas del presidente, que reconoció, entre otras cosas, que no puede permitirse hablar como un hincha más, y mañana continuará preparándose para una temporada en la que Boca tendrá que afrontar también la Copa Libertadores de América, el máximo objetivo para este 2016.