El martes pasado, la Liga Mendocina de Fútbol presentó ante las autoridades del Gobierno de Mendoza un protocolo para el retorno a los entrenamientos. Según el comunicado que publicó la cuenta oficial de Twitter del ente madre del fútbol local, el documento fue elaborado con el aporte de directivos, empleados y coordinadores de los distintos clubes afiliados, con el fin de que sea tenido en cuenta por las autoridades sanitarias en el momento que se permita el regreso de la actividad.
No obstante, lejos de unir a las instituciones en una causa común (solicitar colectivamente el regreso a la actividad en la provincia), el acto desató un nuevo conflicto en las divididas y tempestuosas aguas por las que transita el barco de la Liga Mendocina de Fútbol.
Es que la mayoría de los dirigentes interrogados por Más Deportes, no sólo aseguraron estar en desacuerdo con el conjunto de normas propuestas en el documento, sino que -a contramano de lo que dice el comunicado- también confesaron no haber sido consultados sobre la factibilidad de llevarlo a cabo por parte de cada unos de los clubes que componen la liga.
Si bien el presidente de la Liga Mendocina de Fútbol, Carlos Suraci, expresó que el objetivo de la gestión es que los clubes retomen su vida deportiva paulatinamente, la mayoría de sus pares de las instituciones futbolísticas de Mendoza coinciden en que el protocolo es prácticamente "inaplicable".
Según David Berbel, titular del Deportivo Guaymallén, "ninguna institución amateur puede sostener ese protocolo. Deben opinar los 32 clubes, no sólo Oldrá, Carrique o Tello. ¿Acaso los presidentes de los clubes no existimos? Además, según el Estatuto, el Consejo Directivo debió aprobarlo antes de ser enviado al Gobierno. Ese protocolo no tiene validez y es de nulidad absoluta", afirmó.
Además de las lógicas y manifiestas recomendaciones sanitarias que brinda la Organización Mundial de la Salud (OSM) para prevenir el Covid-19, el protocolo obliga a que los entrenamientos se desarrollen en grupos de 8 jugadores cada 45 minutos, con un receso de 15 minutos entre cada grupo, que haya dispensadores de alcohol en gel o desinfectante en todos los vestuarios y zonas de acceso al campo y que los baños de las instituciones sean higienizados entre una sesión y otra de entrenamiento. Además, sugiere que no se utilicen los vestuarios para que los jugadores se duchen (solo para cambiarse la ropa) y que los entrenamientos entre una categoría y otra se realicen con un tiempo de separación de media hora.
Según Gustavo López, dirigente de AMUF, el protocolo no sólo “es imposible de cumplir, sino que los protocolos presentados por las demás asociaciones, cámaras o federaciones buscan alternativas. Por ejemplo, la utilización de complejos deportivos con turnos escalonados. Esto es pasarle un nuevo problema a cada club, que ya tienen demasiados”.
Mientras los deportes individuales ya disponen de la autorización para el regreso, por ahora el fútbol mendocino parece estar lejos de seguir por ese camino.
Testimonios
"Nuestro club no solo no fue consultado, sino que por estatuto todas esas medidas deben ser aprobadas por el Consejo Directivo. Además, ese protocolo es inaplicable y no tiene coherencia. ¿Quién va a pagar a los DT, PF, utileros para cada turno de trabajo? Fundiría a los clubes más de lo que ya están”.
David Berbel, presidente de CSyD Guaymallén
"Me enteré que la Liga presentó un protocolo, pero amí ni siquiera me informaron. No se lo pasaron a nadie. Estoy totalmente en desacuerdo porque en este momento es inviable para los clubes de fútbol de Mendoza, que no tienen dinero para nada. Con el dinero que desapareció podrían ayudar a los clubes”.
Juan Rosales, consejero de Atlético Palmira
"De la Liga no nos llamaron por el tema del protocolo. Es muy difícil volver a los entrenamientos pensando en retomar la competencia porque es un tema delicado de salud. Además, hay que tener en cuenta que se jugaría sin público y con los gastos que significa. Los clubes no están ni cerca de eso”.
Emilio Castronovo, presidente de Leonardo Murialdo
"Nos consultaron y aportamos nuestro granito de arena. Los protocolos que hemos visto son todos muy parecidos, pero es complicado porque hay jugadores que trabajan y es difícil juntarnos en turnos y grupos. Lo sensato sería esperar a que desde el gobierno autoricen a realizar la actividad como antes”.
Gustavo López, presidente de Dep. Algarrobal
"No estamos en condiciones ni económicas ni sanitarias de cumplir con ese protocolo. ¿Cómo hacemos para contratar profesores que vengan a trabajar al club entre las 10 y las 19. Aparte, nunca se nos consultó y esa es la bronca que tenemos la mayoría de los clubes. Las cosas en la Liga se hacen mal”.
Luis Andino, presidente de Fray Luis Beltrán
¿Se viene una tercera denuncia?
El grupo que comanda el presidente de Gutiérrez, Carlos Quiroga, quien denunció a la actual conducción de la Liga Mendocina de Fútbol por un faltante importante de dinero (unos 150 mil dólares) que iban a ser utilizados para la adquisición del nuevo edificio del ente madre, estaría elaborando una nueva denuncia basada en irregularidades respecto a los seguros contratados por la Liga.
Hay que recordar que el 14 de febrero pasado, el doctor Matías Santoni -abogado de la parte querellante- radicó la denuncia penal bajo el expediente N° P-14374/20 en la Unidad Fiscal N° 19 (Fiscalía de Delitos Económicos) a cargo del fiscal Santiago Garay por la (supuesta) violación del artículo 173, inciso 7 del Código Procesal Penal de Mendoza, que habla de administración infiel.
Además, existe otra acusación presentada por el doctor Santoni en la Dirección de Personería Jurídica que está vinculada a una presunta serie de irregularidades estatutarias que deberá comprobar la justicia. Entre otras, se reclama la presentación del balance del último ejercicio económico.
