Después de un año de rehabilitación y entrenamiento, Fénix, un macho adulto de águila coronada, fue devuelto a su hábitat natural en la reserva de Ñacuñán, provincia de Mendoza.
"Si bien la primera adaptación al entorno fue exitosa, la evolución del ejemplar será monitoreada con un radio transmisor que le fue colocado días previos a la liberación", agregaron desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires sobre la liberación de Fénix, que había sido víctima del tráfico ilegal.
Con 73 centímetros altura y 1,8 metros de envergadura contando sus alas desplegadas, Fénix pesaba 2,8 kilos al momento de su liberación.
"Desde que nos hicimos cargo del Ecoparque ya rescatamos más de 1.000 animales. Muchos de ellos fueron liberados en su ambiente natural luego de ser rehabilitados", dijo al respecto el Ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Eduardo Macchiavelli.
El Águila Coronada (Buteogallus coronatus) es una especie neotropical cuya distribución abarca desde el sur de Brasil hasta el norte de la patagonia argentina.
Tanto a nuestro país como a nivel internacional, está considerada como especie en peligro de extinción, sobre la base de estimaciones que sugieren una población global inferior a 1.500 individuos y con tendencias poblacionales negativas.
Los integrantes del Programa para la Conservación y Rescate de Aves Rapaces del Ecoparque fueron los encargados de rehabilitar y entrenara Fénix antes de su liberación.