Los gremios de transporte de colectivos de Córdoba levantaron anoche el paro luego de ocho días de conflicto, tras una negociación en el Ministerio de Trabajo provincial, y confirmaron que hoy se "reanudará" el servicio.
La decisión fue tomada luego de una “reunión sorpresiva” llevada a cabo en la cartera laboral cordobesa, en la que los delegados de la UTA llegaron a un acuerdo con el Gobierno provincial, para luego trasladar la oferta a las bases, que decidieron volver al trabajo. Así lo indicó el líder de la CGT local, Mauricio Saillen, quien enfatizó que “se levanta la medida” y que “mañana (por hoy) vuelve el servicio”.
Según trascendió, el acuerdo incluye la “reincorporación de los despedidos, el pago de los días no trabajados y porque hoy no se cobre boleto”.
Previo a la resolución del conflicto, la intendencia de Córdoba había activado un sistema de transporte urbano de emergencia, con fuerte custodia policial, para que la población se movilizara en forma gratuita por la ciudad durante la jornada de ayer, mientras cuatro choferes fueron detenidos por tener clavos “miguelito” en su poder.
En tanto, gremios locales, partidos de izquierda y afines al kirchnerismo marcharon a la tarde por las calles céntricas en apoyo a los delegados cordobeses de la UTA que realizaron el paro, quienes no contaron con aval de la dirigencia nacional.
Previo al acuerdo, el secretario de Interior de la UTA central, Jorge Kiener, señaló que los dirigentes cordobeses “llevaron a los trabajadores a una situación que se torna hasta peligrosa para cada uno de ellos” porque, dijo, “le hacen creer a la gente que tienen que seguir fuera de la ley”.
Fuentes policiales señalaron que a lo largo de la jornada el servicio de transporte se desarrolló con normalidad.
Luego de una semana de paralización total del transporte urbano en Córdoba, a primera hora de ayer unos 200 colectivos se distribuyeron el servicio que se prestó en forma gratuita con custodia de gendarmes y policías para que la población pudiera volver a utilizar el servicio.
La medida de fuerza, que se extendió hasta anoche pese al dictado de una conciliación obligatoria y una fuerte intimación del intendente radical Ramón Mestre, fue en reclamo del traslado de paritarias al básico de Córdoba, la aplicación del 21 por ciento de aumento al básico este año y por una puja interna en rechazo a la intervención del gremio a cargo de Luis Arcando.
El intendente Mestre se reunió también con el gobernador Juan Schiaretti y legisladores nacionales para insistir en que se declare al transporte urbano como servicio esencial y evitar así que los gremios hagan paros.
Fuentes policiales señalaron que a lo largo de la jornada el servicio de transporte se desarrolló con normalidad, aunque con el reporte de dos incidentes: uno con un colectivo que pinchó sus ruedas al pasar sobre clavos miguelito y un trolebús que fue agredido a piedrazos.
En ese marco, cuatro trabajadores del transporte fueron detenidos por tener ese tipo de clavos especialmente torneados para pinchar neumáticos y marihuana en su poder, por lo que quedaron a disposición del fiscal Guillermo González.
A su vez, el diputado nacional Mario Negri -presidente del interbloque Cambiemos- confirmó que para hoy estaba prevista en el Congreso una “sesión especial” para pedir modificaciones "a la ley 25.877 de Ordenamiento del Régimen Laboral” .