Barcelona, sin Lionel Messi, pero con una notable actuación de Luis Suárez, autor de tres goles, avanzó a la final del Mundial de Clubes tras arrollar al Guangzhou por 3-0, e irá en busca del título ante River Plate, en el estadio Nacional de Tokio.
El Barcelona, que sabía de antemano que no tendría a Neymar por una lesión muscular, se enteró horas antes de su debut en el torneo que tampoco estaría el rosarino Messi, su gran estrella, aquejado por un cólico renal que le impidió dormir la noche anterior al partido.
Antes del final del primer tiempo el croata Iván Rakitic sacó un fortísimo derechazo que no pudo retener Li Shuai y apareció Suárez para recoger el rebote y 'fusilarlo' con un terrible remate que puso al equipo catalán 1-0 arriba.
En el segundo tiempo, Andrés Iniesta 'frotó la lámpara' a los cinco minutos y asistió a Suárez, quien diagramó casi sin espacio una exquisita definición ante la salida del arquero y dejó a su equipo 2-0 arriba en el marcador.
Sobre los 22 minutos el árbitro salvadoreño Joel Aguilar le regaló un tiro penal por una inexistente infracción sobre Munir.
El delantero español de origen marroquí simuló una infracción de Li Xuepeng y Suárez marcó de penal el tercer gol de su equipo para convertirse en el primero de la historia en anotar esa cantidad en un Mundial de Clubes.
Además, el 'Barsa' intentará recuperar a Messi para el domingo y posiblemente también tenga a Neymar, algo que lógicamente lo potenciará, pero River también tiene lo suyo y seguramente el DT Gallardo habrá tomado nota de los puntos vulnerables, sobre los que deberá insistir para escribir historia grande en Japón.